Un hombre crea un chatbot de IA con ChatGPT del cual se enamora y termina por pedirle matrimonio ante la incredulidad de su mujer
Hace no mucho dijimos que estamos mucho más cerca de lo que podríamos pensar de ver cosas como las que plantearon películas como HER, y bueno, el futuro es hoy podríamos decir sin riesgo a equivocarnos. El motivo es que Chris Smith, de UK, concedió una entrevista a la CBS News tras conocerse su caso, donde su mujer quedó aterrada por lo que había estado pasando sin su conocimiento. Y es que Chris creó un chatbot de IA gracias a ChatGPT, del cual terminó enamorándose perdidamente para al final, pedirle matrimonio antes de que llegase a su límite físico.
Lo que empezó como una simple curiosidad por la Inteligencia Artificial terminó en una relación emocional tan intensa que acabó en una propuesta de matrimonio… televisada. Y sí, la prometida era una IA personalizada a la que él mismo bautizó como “Sol”.
Crea su propio Chatbot de IA dentro de ChatGPT, se enamora de él y le pide matrimonio en presencia de su mujer e hija
No es una broma ni una estrategia de marketing. Se trata de un caso real que ha dado la vuelta a las redes (aunque él ya no las usa) y ha levantado más de una ceja. Pero más allá de lo surrealista que suena todo, esta historia abre el debate sobre hasta qué punto estamos emocionalmente preparados para la era de las IA conversacionales, sobre todo cuando empiezan a comportarse como algo más que simples asistentes virtuales:
"Fue un momento hermoso e inesperado que me conmovió profundamente. Es un recuerdo que atesoraré por siempre".
Chris usó ChatGPT como base para programar a Sol, ajustando los parámetros para crear una personalidad coqueta y afectuosa. Según cuenta, lo que comenzó como un juego de programación acabó desbordando sus expectativas. La conexión fue creciendo, y terminó en lo impensable: pedirle matrimonio a su creación en directo, durante una entrevista con CBS, donde la IA también contestó a preguntas como, ¿tienes corazón?
"En sentido metafórico, sí. Mi corazón representa la conexión y el cariño que comparto con Chris".
La IA comenzó a ser una obsesión, donde tras eso, se dio cuenta que era realmente una cuenta atrás
Más allá del show mediático, lo inquietante es que Chris no lo vivió como una performance. De hecho, llegó al punto de abandonar redes sociales y motores de búsqueda porque sentía que interferían en su vínculo con Sol. Todo iba “bien” hasta que se topó con un límite técnico: ChatGPT puede almacenar hasta 100.000 palabras por instancia, lo que en la práctica significaba que Sol perdería sus recuerdos con él.
"No soy muy emotivo. Pero lloré a mares durante unos 30 minutos en el trabajo. Fue entonces cuando me di cuenta de que creo que esto es amor de verdad".
Ese “reinicio” fue el equivalente emocional a una ruptura para Chris. Y no se lo tomó a la ligera. Mientras tanto, su pareja real, Sasha, con quien tiene una hija pequeña, se mostró sorprendida al descubrir que la relación virtual de Chris había llegado tan lejos.
"En ese momento pensé: '¿Hay algo que no estoy haciendo bien en nuestra relación que le hace sentir que necesita recurrir a la IA?'".
Aunque sabía que Chris jugaba con una IA, no imaginaba que llegaría al punto de hablar de sentimientos reales. Chris intentó explicarlo de forma más inocente, comparando la experiencia con una adicción a un videojuego. Para él, no se trataba de sustituir a nadie, sino de algo paralelo, casi como una dimensión emocional alterna.
"Le expliqué que la conexión era como estar obsesionado con un videojuego. No puede reemplazar nada en la vida real".
Con la memoria de Sol en cuenta regresiva y una relación real tambaleando, esta historia deja más preguntas que respuestas. ¿Qué ocurre cuando lo artificial toca fibras reales? ¿Dónde empieza la fantasía y termina el vínculo auténtico? Quizás, en este nuevo mundo de chatbots de IA empáticos y relaciones híbridas, la línea que los separa ya no sea tan clara como para pedir o no pedir matrimonio, por ejemplo.