Intel es un polvorín: David Zinsner intenta poner calma explicando la estrategia de cara a los inversores, mientras empiezan las apuestas sobre quién será el nuevo CEO

Intel atraviesa un momento terminal, posiblemente disruptivo, tras la inesperada salida de su CEO, Pat Gelsinger, un anuncio que ha dejado a inversores y socios preguntándose sobre el futuro de la compañía. David Zinsner, actual codirector ejecutivo interino y director financiero durante dos años, reafirmó la continuidad de la estrategia de la empresa en la Conferencia Global de Tecnología de UBS. Al mismo tiempo, los rumores sobre el sucesor de Gelsinger como nuevo CEO disparan las apuestas casi al mismo nivel que las teorías de la conspiración, ¿por qué? Veámoslo.

El primero en la lista, según los primeros rumores, es nada menos que Lip-Bu Tan ex miembro de la junta directiva, y curiosamente, una de las personas que más ha criticado internamente a Gelsinger en sus decisiones, hasta el punto, que se rumorea una especie de influencia en la junta para su despido, aka, jubilación anticipada.

David Zinsner se expone en un momento donde Intel necesita tener clara su estrategia

Este mismo miércoles Zinsner saltó a la palestra tras la presentación de la arquitectura Battlemage para GPU gaming con las B580 y B570 dentro de la gama Arc. Lógicamente, los periodistas querían saber qué rumbo iba a tomar Intel tras la salida fulgurante de Gelsinger, y este respondió:

"La junta directiva fue bastante clara en cuanto a que la estrategia central permanece intacta"

Intel mantiene su enfoque en fortalecer los grupos que componen Intel Products: computación cliente, centro de datos e inteligencia artificial, y redes y edge. Estos equipos no solo desarrollan los principales productos de la empresa, como los procesadores Core y Xeon, sino que también actúan como el cliente más relevante para el negocio de Intel Foundry.

"Queremos seguir siendo una fundición de primera clase. Queremos ser el proveedor occidental de silicio de vanguardia para los clientes. Ese sigue siendo nuestro objetivo", señaló Zinsner.

Además, destacó la relación simbiótica entre Intel Products e Intel Foundry, enfatizando la importancia de que ambos segmentos trabajen en sincronía para alcanzar el éxito.

"Pero también entendemos que es importante que el cliente número uno de Foundry tenga éxito para que Foundry tenga éxito, y por eso la junta también quiere poner énfasis en la ejecución del producto para asegurarse de que el negocio de fundición siga siendo exitoso"

La fundición de Intel debe de dar beneficios lo antes posible porque el gasto en I+D y escáneres de ASML sigue su rumbo

La junta directiva ha solicitado a los líderes de la compañía que maximicen los retornos de las grandes inversiones realizadas en la fabricación. Y es que Intel sigue comprando, o, mejor dicho, reservando, escáneres de ASML para EUV High-NA, donde tiene una ventaja de algunos meses sobre TSMC, así que parece que por ahí seguirán en su estrategia. Según Zinsner, este será uno de los objetivos prioritarios para el futuro inmediato.

"Yo diría que lo que definitivamente ha surgido de la manera en que la junta directiva está pensando sobre esto es que reconocen y nos han presionado para que digamos: Hemos hecho muchas inversiones desde una perspectiva de capital en Foundry, y necesitamos comenzar a ver algún incremento [de la rentabilidad del capital invertido] en esas inversiones, y eso es lo que estamos comprometidos a hacer.

Ese será uno de mis principales objetivos. Una cosa que hemos notado es que hay cosas que trascienden todas las unidades de negocios en el lado del producto que probablemente no estaban optimizadas, y creo que tener un líder sobre todo eso nos permite ser un poco más funcionales en la forma en que manejamos los productos, tener excelencia en todas esas funciones, desempeñarnos mejor, ejecutar mejor y ser cohesivos en todas las unidades de negocios en términos de cómo llegan al mercado", explicó.

Zinsner elogió a Holthaus como la persona ideal para asumir esta responsabilidad.

"Conoce muy bien a todos los clientes. Todos la adoran. Ha estado en esa unidad de negocios o en puestos de ventas durante décadas, por lo que entiende el negocio bastante bien. Era la persona perfecta, no solo para asumir el puesto de CEO de producto, sino también para ocupar este puesto de co-CEO", aseguró.

¿Quién será el próximo CEO de Intel? Las apuestas y rumores se disparan

Intel se encuentra en la etapa inicial de la búsqueda de un nuevo CEO, un proceso en el que parece estar considerando tanto candidatos internos como externos. Según Zinsner, el próximo líder deberá tener experiencia significativa en las áreas de fabricación y productos.

"Supongo que el CEO tendrá... Alguna capacidad en torno a la fundición así como en el lado del producto", señaló.

Reuters reportó que entre los candidatos evaluados se encuentra Lip-Bu Tan, un exmiembro de la junta directiva de Intel, sugiriendo que la compañía podría optar por alguien con conocimiento profundo del sector. Este cambio de liderazgo llega en un momento en el que Intel necesita transformarse culturalmente para competir en el negocio de fundición y mantener su relevancia en el diseño de chips.

Naga Chandrasekaran, jefe de fabricación de fundición y cadena de suministro de Intel, destacó la necesidad de un cambio cultural significativo para mejorar el rendimiento tanto en el segmento de fundición como en el de semiconductores.

"La empresa también necesita un cambio cultural significativo para convertirse en un actor exitoso en el negocio de fundición, así como en el de semiconductores”.

Aunque el liderazgo interino ha tratado de transmitir confianza, la incertidumbre en torno a la partida de Gelsinger ha generado opiniones diversas. Randy Copeland, CEO de Velocity Micro, compartió su perspectiva sobre la situación.

"No creo que vayan a implosionar completamente ni nada, pero creo que están usando a Pat como chivo expiatorio de una estrategia a nivel de toda la compañía que no va tan rápido como a Wall Street le gustaría".

El desafío para el próximo CEO será no solo guiar a Intel hacia un futuro más rentable, sino también recuperar la confianza de inversores y socios estratégicos. En este contexto, su capacidad para traducir la visión estratégica de la empresa en resultados tangibles será fundamental. Y todo, tras la incertidumbre con olor a conspiración que hubo tras la jubilación exprés y por sorpresa de Gelsinger, donde hay comentarios de todo tipo, en especial, de disputas y discusiones internas con la fundición y la visión a largo plazo de la empresa.