Los Core Ultra 200S necesitan usar Intel APO y Dynamic Tuning para ganar FPS, el microcódigo y MEI no hacen milagros
Si ayer mismo veíamos cómo ASUS conseguía aumentar los FPS de los Core Ultra 200S mediante un 285K con el nuevo microcódigo 0x114 de Intel y varios parámetros dentro de sus placas base y BIOS, hoy llegan datos que tiran por tierra todo ello y ponen de relieve una nueva realidad y diferencias sutiles, pero definitorias. Los Core Ultra 200S no van a aumentar de rendimiento en cuanto a FPS con el microcódigo 0x114 y el MEI de por sí, necesitan software externo, como APO y Dynamic Tuning, y parámetros varios para conseguirlo.
No hay milagros ni por Navidad en Intel, salvo que creas en ellos y sepas cómo interpretarlos. TechpowerUp ha lanzado otra revisión del artículo previo con los microcódigos probando las últimas BIOS disponibles que incluyen el ya famoso 0x114 y el nuevo MEI 1852 V 2.2. Como era de esperar, cero sorpresas y varias lecturas sobre qué está pasando.
Intel no logra mejorar el rendimiento de sus últimas CPU con el microcódigo 0x114 y el nuevo MEI
Los datos de TPU son muy claros y tenemos los ejemplos abajo, al menos en gaming: el nuevo microcódigo 0x114 y el nuevo MEI en su conjunto no hacen ni mucho menos milagros. De hecho, es que no hacen diferencia alguna, ya que hablamos de márgenes de error de menos del 1%, insignificante para lo que se prometía.
Ni tampoco fuera del gaming podemos hablar de diferencias, todo está muy apretado, tanto que hablamos de 1 segundo aquí y allá, 1 o 2 FPS de distancia como máximo, y en definitiva, el mismo rendimiento que el día en el que salieron prácticamente. ¿Dónde está esa mejora que vimos justo ayer donde ASUS elevaba el hype sobremanera hasta el punto de que el 285K podía superar al 14900K?
Pues resulta que en el software, todo parece provenir de las mejoras particulares del software y de las opciones de BIOS de cada fabricante.
Intel APO y Dynamic Tuning son cruciales en los Core Ultra 200S
Es otra de las grandes novedades que hemos descubierto con este microcódigo y su nuevo MEI, y no porque sean nuevos estos software, sino por el hecho de que deben ser usados para lograr escalar el rendimiento que vimos. Intel especifica que son vitales, y así se ha demostrado hoy, porque sin ellos y sin los ajustes específicos de cada fabricante en la placa base, no hay mejora, porque no puede haberla.
Lo que se ha demostrado es que el camino de AMD con núcleos de alto rendimiento en exclusiva y caché vertical es la opción sensata para no tener problemas con el software, sea Windows o los juegos. Intel tiene que recurrir a su propio software de optimización porque si no el rendimiento no escala, y aparte, las BIOS deben desbloquear las mayores frecuencias en D2D y NGU, así como romper los límites de energía previos y reducir la latencia general, para ganar FPS.
Por tanto, "milagros a Lourdes". Todo es cosa de optimización por software, overclock y desbloqueo de los perfiles de energía mediante BIOS, porque lo único que hace el microcódigo y el nuevo MEI es optimizar los escenarios para que esto no suponga un problema de estabilidad mediante cambios en el PPM y la gestión de la energía, pero poco más.
De hecho, como dijimos ayer, sigue sin haber datos concretos sobre el nuevo consumo de energía de cada CPU, que habrá subido y no poco, ni de temperaturas. Nadie duda que desprenderse del SMT (Hyper Threading en este caso) es un acierto, que la arquitectura general diseñada en Tile es un paso necesario que tendrá que recorrer AMD en su momento con TSMC, pero Intel debe abandonar los E-Core logrando una mejora en la eficiencia en los P-Core, algo que también se dará en un par de generaciones si cumplen el roadmap.