China tensa la cuerda con EE.UU.: «Sus chips ya no son seguros, nuestras empresas deberían comprar localmente»
En un llamado coordinado sin precedentes, cuatro de las principales asociaciones industriales de China instaron a las empresas del país a evitar la compra de chips fabricados en EE.UU., argumentando que estos "ya no son seguros". Este mensaje llega en un contexto de crecientes tensiones entre Pekín y Washington, marcadas por restricciones comerciales y disputas económicas donde China está tensando la cuerda tras la amenaza de Trump con el 100% de aranceles a los países BRICS si se desdolarizan.
Las declaraciones de estas asociaciones, que representan sectores clave como telecomunicaciones, economía digital, automóviles y semiconductores, fueron emitidas el martes y abarcan más de 6.400 empresas miembros. ¿Será China la que rompa con EE.UU. vista la postura de su próximo presidente?
China no considera seguros los chips de EE.UU., pero no dice los motivos, ¿quieren independizarse definitivamente o es solo una advertencia?
Aunque no se detallaron los motivos específicos por los cuales los chips estadounidenses serían poco confiables, la postura refleja una respuesta a la reciente ofensiva de Estados Unidos contra la industria de semiconductores china.
El lunes, Estados Unidos endureció nuevamente sus restricciones, bloqueando exportaciones hacia 140 empresas, incluyendo el destacado fabricante chino Naura Technology Group. Esto podría impactar a gigantes estadounidenses como NVIDIA, AMD e Intel, que, a pesar de las restricciones, han mantenido presencia en el mercado chino.
Sin embargo, desde la Asociación de la Industria de Semiconductores de Estados Unidos, el mensaje fue claro:
“Los llamados coordinados en China para limitar la adquisición de chips estadounidenses son inútiles, y cualquier afirmación de que los chips estadounidenses ‘ya no son seguros ni confiables’ es simplemente inexacta”.
Además, el grupo subrayó la importancia de que los controles de exportación sean estrictos y enfocados en objetivos específicos de seguridad nacional, al tiempo que exhortó a ambas naciones a evitar una escalada mayor.
China quiere fomentar la adquisición de chips nacional para ser independiente lo más rápidamente posible
Un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca respondió afirmando que el gobierno estadounidense “tomará las medidas necesarias” para contrarrestar lo que consideran acciones coercitivas por parte de China.
Tom Nunlist, director asociado de la consultora Trivium China, destacó que las advertencias de las asociaciones chinas podrían interpretarse como consejos más simbólicos que imperativos.
“Las empresas pueden escucharlas, pero el mercado determinará si toman medidas o no”.
Entre las recomendaciones de las asociaciones chinas, la Sociedad de Internet de China instó a las empresas nacionales a analizar detenidamente sus decisiones de compra y fomentar la cooperación con fabricantes de chips de otras regiones. En su cuenta oficial de WeChat, alentaron a las compañías a usar “proactivamente” chips fabricados localmente o por empresas extranjeras dentro de China. También advirtieron que los controles estadounidenses han causado “daños sustanciales” al desarrollo de la industria tecnológica del país.
En un ejemplo anterior de esta política, Pekín sometió al fabricante estadounidense de chips de memoria Micron a una revisión de ciberseguridad, prohibiendo posteriormente la venta de sus productos en industrias clave de China. Esto afectó un pequeño pero significativo porcentaje de los ingresos de la empresa.
Intel tampoco ha escapado al escrutinio. En octubre, la Asociación de Ciberseguridad de China solicitó una revisión de seguridad de sus productos, afirmando que la compañía había “perjudicado constantemente” los intereses y la seguridad nacional de China. Sin duda, es un toma y daca entre los dos gigantes, donde las empresas están justo en medio, y desde ese punto se decidirá en la próxima década quien dominará la tecnología, y por tanto, el planeta.