TSMC llega al 100% de su capacidad de producción en sus 5 nm y 3 nm con una tasa de éxito de casi el 90%

TSMC continúa consolidando su posición en el mercado de semiconductores, especialmente en los nodos de 3 nm y 5 nm, donde la demanda sigue en aumento, impulsada por sectores como la IA y los dispositivos móviles de alta gama. Tanto es así, que se informa sobre la utilización de la capacidad de producción de TSMC para los 5 nm, la cual alcanzará el 100% durante el próximo año, lo que refleja el interés masivo de la industria, en particular de empresas líderes como NVIDIA. Además, con una tasa de éxito impresionante.

Los verdes han realizado pedidos significativos de su serie de GPU B200 para IA, con la entrega prevista de hasta 200,000 unidades para finales de este año. Este volumen de demanda ha llevado a TSMC a priorizar los pedidos de NVIDIA en sus líneas de 5 nm, lo que asegura una saturación total de sus instalaciones para satisfacer las necesidades del mercado de IA.

NVIDIA vuelve a colapsar TSMC y su capacidad de producción se va al 100% para sus 5 nm y variantes de 4 nm

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Además de lo dicho, el crecimiento en la capacidad de producción de 5 nm de TSMC también se verá impulsado por la apertura de su nueva planta en Arizona, programada para comenzar la producción en 2024. Esta instalación responde a la creciente necesidad de semiconductores avanzados y busca diversificar la producción para satisfacer la demanda de Estados Unidos y otros mercados estratégicos. La expansión de esta capacidad en territorio estadounidense es una señal de la estrategia de TSMC para reforzar su presencia en mercados clave y mantenerse a la vanguardia de la industria de semiconductores mientras contenta a sus socios.

Por otro lado, el nodo de 3 nm de TSMC ha atraído a grandes clientes, incluyendo a Apple y MediaTek, sin olvidar a Intel y su último pedido para Arrow Lake, quienes apuestan por su tecnología avanzada para alimentar sus dispositivos móviles, portátiles y PC de alta gama.

Con el despliegue de 3 nm en todas sus variantes, TSMC no solo está fortaleciendo su posición de liderazgo, sino que está abriendo nuevas oportunidades de ingresos a medida que el mercado de dispositivos móviles adopta esta tecnología como una de las principales tendencias de los próximos años.

La cadena de suministro también ha resaltado que el dominio de TSMC en 3 nm permitirá a empresas como MediaTek capturar mayor participación en el mercado de smartphones, especialmente en regiones donde la competencia entre fabricantes de semiconductores es intensa.

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La dificultad que enfrentan algunos rivales, como Samsung, para mantener altos rendimientos en sus propios procesos de fabricación ha resultado en una ventaja competitiva para TSMC, que tiene la capacidad de satisfacer consistentemente la alta demanda del mercado con productos de alta calidad y eficiencia. Y es que se dice que, en los 5 nm y sus variantes de 4 nm, la tasa de éxito va desde el 82% en el peor de los escenarios, hasta casi rozar el 90%, realmente increíble.

Además, la infraestructura de TSMC está bien equipada para enfrentar los retos de la producción avanzada, gracias a su tecnología de packaging CoWoS (Chip-on-Wafer-on-Substrate), que se estima alcanzará una capacidad de producción mensual de 36,000 piezas a finales de este año, incrementándose a 90,000 para el próximo año. Esto proporcionará un alivio en la presión actual de la capacidad de producción, particularmente en lo que respecta a la fabricación de chips para IA y dispositivos móviles avanzados, donde el rendimiento y la calidad son cruciales.

La sólida demanda de semiconductores de 5 nm y 3 nm ha permitido a TSMC establecerse como un actor dominante en el mercado. La previsión de una demanda elevada, sobre todo impulsada por la IA y los dispositivos móviles avanzados, indica que TSMC mantendrá una posición ventajosa frente a otros competidores.

La combinación de estos factores deja claro que TSMC está en camino de consolidar una presencia cuasi monopolística en la industria de semiconductores, especialmente mientras rivales como Samsung (o incluso Intel) encuentran dificultades para alcanzar niveles de rendimiento competitivo. Si siguen así, van a terminar por hundir a estos rivales, los cuales pasan por momentos muy duros en sus fundiciones.