La PS5 Pro no atrae a los usuarios y no se agota, pero enfrenta críticas: leve mejora gráfica frente a la PS5 original en juegos

Las consolas de videojuegos de actual generación son capaces de jugar a los últimos juegos a 30 FPS en modo calidad y 60 FPS en modo rendimiento, algo que suele cumplirse en la mayoría de casos, pero no siempre se obtienen FPS estables o se deben hacer grandes sacrificios de calidad. Es por ello que Sony decidió lanzar la PS5 Pro, destinada a aquellos jugadores entusiastas que quieren jugar a 60 FPS y mayor resolución a sus juegos favoritos. Aunque vimos que la PS5 Pro edición 30 aniversario se agotó en un tiempo récord, ahora que la PS5 Pro ha salido oficialmente en tiendas, podemos ver que está disponible y no es objeto de reventa además de que está recibiendo críticas y podría no acabar cumpliendo las expectativas de ventas.

Una consola como la PS5 o la Xbox Series X puede jugar a todo tipo de videojuegos a pesar de tener un coste mucho menor al de un PC equivalente. Estamos hablando de consolas que rinden bastante bien por su precio, en gran parte debido a que los videojuegos rinden mejor en estas que en un PC que tenga una potencia similar. Los ports a PC suelen decepcionar en la gran mayoría de casos y no es de extrañar cuando vemos el mal rendimiento que se consigue. Hace poco vimos lo mal que iba la beta de Monster Hunter Wilds en ordenadores que eran más potentes que una PS5 y aún veíamos modelados de muy pocos polígonos (usando el LOD mínimo) y FPS bajos.

La PlayStation 5 Pro se ha lanzado de forma oficial y no se ha agotado en las distintas tiendas

Consola PS5 Pro para comprar

Sony presentó la PS5 Pro como su consola más potente capaz de llegar a duplicar el rendimiento de la PS5 original, tanto por la nueva GPU siendo un 45% más rápida como por el reescalado PSSR. Si bien todo esto era una gran noticia para aquellos que querían una consola más potente, teníamos como consecuencia un elevado precio que partía de los 800 euros para el modelo base. Las reservas y pedidos anticipados de la consola se agotaron rápidamente, sobre todo los de la edición 30 aniversario que costaba 1.099 euros.

Ahora que estamos a 7 de noviembre, por fin tenemos la consola PS5 Pro a la venta en tiendas y no se ha agotado, por lo que está disponible y los revendedores no pueden aprovecharse. Esta se encuentra en tiendas populares como Amazon, PcComponentes, MediaMarkt, Fnac o incluso en la tienda oficial de Sony. Esto implica que no hay problemas de falta de stock (por el momento) y es posible comprarla sin problemas, aunque eso sí, vas a tener que aceptar que no hay lectores de discos disponibles y en caso de que aparezca alguno a la venta, va a costar mucho más que los 120 euros oficiales.

La consola PS5 Pro no ofrece una gran mejora gráfica en algunos juegos y estamos pagando casi el doble que la consola original

El precio de la PS5 Pro es el aspecto más negativo de la consola, siendo este el principal impedimento a la compra por parte de los jugadores interesados. Hay que tener en cuenta que el precio es de casi el doble que una PS5 normal y se trata de la consola más cara que hemos visto hasta la fecha por parte de Sony. Esta es muy distinta a la PS4 Pro que salió a la venta por un precio solo 50 euros más caro que la original. Si bien es cierto que la PS5 Pro se estrena con una mayor cantidad de juegos mejorados respecto a la anterior generación, las mejoras en ocasiones son muy pequeñas.

Hay títulos donde las diferencias entre el modo rendimiento de la PS5 y el de la PS5 Pro no son tan distintos como se esperaba costando mucho más. En Ars Technica tenemos un artículo donde opinan que el mayor problema de la PS5 Pro es que la PS5 ya es muy buena. Esto hace que sea difícil poder competir contra la consola original y mucho más complicado superarla. Para muchos jugadores hay casos de juegos donde no se observa mucha diferencia de rendimiento y/o calidad frente a la original, como podemos ver en las imágenes de Ratchet en la PS5 (izquierda) vs PS5 Pro (derecha). Al final todo es subjetivo y la compra puede valer la pena o no dependiendo de la persona y sus necesidades, pero parece ser que en términos generales, no está sorprendiendo mucho a la comunidad.