Intel es demasiado importante para quebrar: Washington ya discute posibles soluciones
Este fin de semana se ha dado a conocer que las autoridades de Washington han comenzado a mirar con lupa a Intel. El motivo no es otro que comenzar a buscar soluciones en caso de que la compañía necesite ayuda más allá de los miles de millones de dólares pertenecientes a los fondos gubernamentales de la Ley de CHIPS. Todo ello en un momento donde Intel indica que aún no ha recibido este dinero.
Por ahora los inversores están tranquilos. Y es que fue ayer cuando la compañía mostró unas sólidas ganancias trimestrales. Ahora bien, lleva sonando desde mucho tiempo el interés de Qualcomm por adquirir a Intel. A estos rumores se le ha sumado que tanto Apple como Samsung también habrían iniciado conversaciones en un intento de comprar a Intel. Pero ahora es el propio Gobierno de los Estados Unidos el que revisará si las finanzas de Intel continúan deteriorándose, convirtiéndose así en una posible opción de respaldo.
Intel es demasiado importante para permitir que caiga: Washington vigila
Según informa el periódico Semafor, fuentes cercanas al asunto calificaron toda la información de "puramente precautorias". Y es que "se considera que Intel es demasiado importante desde el punto de vista estratégico como para permitir que se meta en serios problemas". Hay que recordar que Estados Unidos quiere que Intel sea su TSMC estadounidense. Y es que Intel es el único rival directo que tiene una TSMC situada justo al lado de China. Por lo que Estados Unidos prefiere producir sus chips más avanzados en suelo estadounidense, y más cuando busca garantizar la seguridad nacional.
"Hemos esbozado una clara estrategia que estamos ejecutando con rigor, y los sólidos resultados operativos que hemos obtenido en el tercer trimestre demuestran importantes avances respecto a nuestro plan", declaró un portavoz de Intel en un comunicado.
"Intel es la única empresa estadounidense que diseña y fabrica chips de vanguardia y está desempeñando un papel fundamental para hacer posible un ecosistema de semiconductores competitivo a escala mundial en Estados Unidos".
Según los informes, el gobierno podría alentar una opción de fusión. Fusión que también estaría liderada por el sector privado, y que buscaría combinarse el negocio del diseño de chips con un rival de la industria como AMD o Marvell. El motivo no es otro de que el gobierno no quiere rescatar a una empresa tal y como hicieron en el año 2008 tomando participaciones directas de los fabricantes de automóviles y bancos. Los responsables políticos temen que ese movimiento salga mal si Intel sigue sufriendo un descenso continuo de las ventas.
Seguridad Nacional y evitar depender de TSMC
El principal motivo de Estados Unidos en "proteger" a Intel está en que si cae, debería depender de TSMC (Taiwán o China dependiendo de a quién preguntes) y Samsung (Corea). Por no hablar de que Intel ya está implicada en un proyecto para fabricar chips de vanguardia para Washington junto a otras compañías estratégicas como Boeing. Y otros fabricantes ligados a la aviación, espacio, satélites, y un largo etcétera.
El futuro de Intel pasa por su nuevo proceso de fabricación de vanguardia, el Intel 18A. Este debutará en los ordenadores de consumo durante la segunda mitad de 2025 con sus procesadores Panther Lake. Los informes son tan prometedores, que oficialmente, Amazon utilizará esta litografía invirtiendo miles de millones de dólares. Además de otras dos "compañías centradas en la computación". Hasta entonces, Intel también ha comenzado a realizar esfuerzos en reducir sus gastos operativos en un momento donde sus ingresos están disminuyendo.
"Confiamos en la visión global de Intel para fabricar chips en Estados Unidos". Dijo un portavoz del Departamento de Comercio. "Seguimos trabajando estrechamente con la empresa para finalizar su adjudicación y proporcionaremos más actualizaciones a medida que estén disponibles".