China advierte a Japón: si restringen las ventas y el servicio técnico a sus equipos de fabricación de chips no habrá tierras raras
China no está para juegos, no quiere sumar más problemas a los que ya tiene con EE.UU. y Europa y advirtió que tomará severas represalias económicas contra Japón si restringe aún más las ventas y el servicio técnico de equipos de fabricación de chips a empresas chinas. Toyota dio la voz de alarma cuando dijo en privado a los funcionarios japoneses que China podría reaccionar a las restricciones cortando el acceso de Japón a los minerales necesarios para la producción automotriz, es decir, las tierras raras. Una vez más, el boicot de occidente y sus aliados tendrá represalias.
Varios funcionarios chinos habían expuesto repetidamente la posición con sus homólogos japoneses en reuniones recientes según el informe. El Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo que el país siempre se ha opuesto firmemente a la "perturbación artificial" de la producción global y la estabilidad de la cadena de suministro, a la politización de la cooperación económica y comercial normal y a los bloqueos científicos y tecnológicos contra China, pero…
China advierte a Japón con el hecho de restringir o cortar la venta o servicio técnico para sus equipos de fabricación de chips, o no habrá tierras raras
Como suele pasar en estos casos, cada uno juega las bazas que tiene o que necesita, y en este caso China sabe perfectamente que el control de las tierras raras les da un poder increíble en estos momentos, así que no permite tonterías con todo el tema de los chips, y así lo hace saber:
"China siempre ha estado comprometida con el mantenimiento de la seguridad y la estabilidad de la cadena global de producción y suministro, y siempre ha implementado medidas de control de exportaciones justas, razonables y no discriminatorias", dijo el portavoz Mao Ning.
Un portavoz de Toyota dijo que el fabricante de automóviles estaba considerando constantemente las mejores estrategias de adquisición, no limitadas a los recursos minerales, para satisfacer las necesidades de sus clientes. Japón comenzó a restringir las exportaciones de 23 tipos de equipos de fabricación de semiconductores, alineando sus controles comerciales de tecnología con un impulso estadounidense para frenar la capacidad de China de fabricar chips avanzados en julio.
China no se quedará en restringir las tierras raras y avisa de "severas repercusiones económicas"
Altos funcionarios chinos han advertido repetidamente a Japón sobre el riesgo de intensificar las sanciones a los semiconductores en sintonía con la política estadounidense. Se informa que, si Japón decide restringir las ventas y el mantenimiento de equipos de semiconductores en sintonía con la política estadounidense, podría enfrentar “severas repercusiones económicas” por parte de los chinos. Con la creciente presión de los EE. UU. sobre posibles nuevas reglas, Japón se encuentra incómodamente entre la espada y la pared.
El acceso a tecnología avanzada de semiconductores es el motivo de la postura de China, pero los peores efectos de las represalias chinas probablemente se sentirían en una industria completamente diferente en Japón. Se teme que las represalias chinas se centren en bloquear suministros esenciales destinados a la industria automotriz japonesa. No se descarta que hagan lo mismo con Rapidus, su nueva empresa con la que pretenden competir en chips avanzados.
Japón es un archipiélago de 14.125 islas densamente pobladas, pero con escasez de recursos. Se podría decir que la industria japonesa depende de la importación de importantes materias primas. Uno de los principales empleadores del país es el mayor fabricante de automóviles del mundo: Toyota. La firma fabrica unos 10 millones de vehículos al año, muchos de los cuales se fabrican en Japón.
Eso consume muchos recursos, y la vecina China es la fuente más cercana y obvia. Los políticos japoneses deben andar con mucho cuidado, porque China controla más del 90% de tierras raras del mundo y ninguno de los socios de Japón tiene siquiera reservas.
Tokyo Electron a escena, y no para bien
Una de las ventajas de Japón podría ser que su industria de semiconductores no tiene el perfil alto que solía tener. Se destaca el papel de una sola empresa importante en esta cuestión de las sanciones contra China: Tokyo Electron, empresa de fabricación de equipos y herramientas para chips y semiconductores en general de la cual normalmente hablamos.
Tokyo Electron es un fabricante de equipos avanzados de producción de semiconductores que se utilizan en todo el mundo, competidor de ASML, Applied Materials Lam Research y otras empresas occidentales. Por lo tanto, si China decide también cortar el grifo a las empresas de chips japonesas, estas pueden enfrentar los mismos problemas que las europeas o americanas.
Al final, es un juego de tira y afloja, donde todas las partes están conectadas y por mucho que les pese, no pueden vivir eternamente sin las otras. El globalismo y el capricho de situar los minerales en ciertos puntos del planeta tienen la culpa, veremos si Japón y China no entran en un conflicto tecnológico por las tierras raras, la venta y el suministro de equipos como ya hemos visto en occidente.