EE.UU. no está preocupada por la cantidad de FAB de chips que está construyendo China: va a sancionar a 11 más junto con Europa y Japón
La maquinaria de Estados Unidos no para. Tras la reunión del G7 un funcionario norteamericano pasó por Europa, Países Bajos para ser concretos, con rumbo a Japón y un fin totalmente claro y conciso: EE.UU. va a sancionar a 11 FAB de chips de nueva factura en China y sus aliados deben apoyar la decisión, o asumir consecuencias.
EE.UU. va a volver a presionar a sus socios, esos que trabajan con su tecnología y de la cual dependen en mayor o menor parte, para sus propios intereses. Alan Estevez, jefe de política de exportaciones de EE.UU., dejó claro que su país intenta aprovechar el acuerdo de bloqueo entre Estados Unidos, Países Bajos y Japón en materia de equipos de fabricación de chips hacia China, para apretar una vez más con sanciones.
No importa cuánto construya o cree China, EE.UU. sancionará como medida de presión
Parece muy claro que todo lo que provenga del país asiático en las materias a las que Estados Unidos no les interese la competencia van a ser sancionadas. Tan claro lo tienen en China que su Ministro de Asuntos Exteriores ha vuelto a poner el grito en el cielo por el intento de presión que está ejerciendo los americanos con sus socios:
"China se opone a que Estados Unidos participe en una confrontación y coacción a otros países y suprimiera la industria de semiconductores de China. Este comportamiento ha obstaculizado seriamente el desarrollo de la industria global de semiconductores y eventualmente será contraproducente" dijo Lin Jian.
Países Bajos ya confirmó la reunión con EE.UU. el lunes y ahora el funcionario viaja a Japón para cerrar las condiciones del acuerdo que, según se ha sabido, está enfocado en las fábricas de los de Xi Jinping, donde ya figuran nombres en la Black List como SMIC.
EE.UU. sancionará a 11 FAB de Chips más en China para bloquear cualquier intento de compra de equipos de fabricación o escáneres de ASML
No es muy habitual que un país sancione y bloquee a una empresa en concreto, pero mucho menos a una fábrica como tal. EE.UU. ya tiene en su lista negra a 5 de estas FAB de chips en China, donde lógicamente destaca SMIC, su mayor fabricante. El objetivo de la visita a ambos países del funcionario americano es cerrar un acuerdo para extender dicha lista a 11 FAB más que están creciendo rápidamente y que intuyen mediante sus servicios de inteligencia que pretenden hacerse con herramientas de fabricación y escáneres en breve.
Además de esto, EE.UU. quiere controlar equipos adicionales de fabricación de chips, aunque esta parte es tan amplia y no ha sido aclarada que no nos aventuraremos a decir a qué se refieren exactamente con ello. Dejando esto a un lado, da la impresión de que no importa lo que construya, o las empresas que cree China, o se dividan o diseccionen para intentar saltarse las sanciones, EE.UU. ahora sí que parece ir por delante del gigante asiático y mira con lupa no solo lo que hacen, sino lo que pretenden hacer.
Como siempre decimos, no van a poder frenarlos, solo ralentizarlos, y esa parece ser la estrategia en un momento donde, como ya vimos, en 4 años han gastado más que en los últimos 27 para llevar a EE.UU. al podio de los semiconductores con un coste a largo plazo terrible en lo económico.