El 67% de los encuestados en EE.UU. piensan que el gobierno debe impedir que se logre una IA demasiado inteligente
Una nueva encuesta en EE.UU. revela los principales miedos de las personas de a pie con todo lo relacionado con la IA, el gobierno y las empresas, sin olvidar lo que tiene que ver con China. En plena carrera de sus Big Tech por competir entre ellas y marcar la mayor diferencia de innovación y rendimiento contra China, saber qué opinan los contribuyentes sin importar su nivel de conocimiento general sobre la IA determina qué debe hacer el gobierno y las empresas para acallar las críticas que llegan desde los usuarios.
Hablar de IA dentro de poco va a ser sinónimo de una especie de entidad creada por el ser humano que será, sin ninguna duda, más inteligente que este. Y eso preocupa y mucho. Si el FMI hablaba de Tsunami en los puestos de trabajo en pleno 2024, si OpenAI pedía a los gobiernos una renta básica universal porque no habrá "curro" para todos, los americanos no están menos preocupados que tú o un servidor.
Una abrumadora mayoría en una encuesta afirma que la IA debería estar acotada: debe de haber responsabilidades y temen una IA demasiado inteligente
Una encuesta realizada hace meses, en concreto, en septiembre de 2023, muestra ahora sus resultados tras una evaluación exhaustiva de los datos recopilados a nivel nacional en EE.UU. Esta se llevó a cabo por el Instituto de Políticas de Inteligencia Artificial, o AIPI, y la conclusión general que extraen de datos y opiniones varias es tan clara que les ha sorprendido incluso a ellos.
En general, la gente piensa que "hay que reducir el acceso a la IA para mantenerla fuera de manos equivocadas y que las empresas de tecnología deberían ser consideradas responsables de los daños causados por los modelos que crean y lanzan al mercado."
Además de esto, se aportan datos clave y una serie de hallazgos realmente interesantes y curiosos a tratar.
Europa no va mal desencaminada con su Ley de IA para la UE, puesto que los americanos van muy en esa línea
La gente quiere y espera que el gobierno entre de lleno a regular la IA de las empresas, y además, deja las siguientes conclusiones:
- El 73% de los votantes cree que las empresas de IA deberían ser consideradas responsables de los daños causados por la tecnología que crean, en comparación con sólo el 11% que cree que no deberían hacerlo.
- El 77% de los votantes apoya una ley que exige que los anuncios políticos revelen su uso de IA, incluido el 64% que la apoya firmemente, y solo el 10% se opone a dicha ley.
- El 64% de los votantes apoya que el gobierno cree una organización encargada de auditar la IA, mientras que solo el 14% se opone.
- Por un margen de más de 2:1, los votantes prefieren centrarse en abordar poderosas amenazas desconocidas (46%) en lugar de amenazas más débiles conocidas a corto plazo (22%).
- El 65% de los votantes prioriza mantener la IA fuera del alcance de malos actores, en comparación con el 22% que prioriza brindar los beneficios de la IA a todos.
- El 73% de los votantes quiere restringir el acceso de las empresas chinas a la computación en la nube de las empresas estadounidenses, mientras que solo el 9% cree que Estados Unidos debería seguir permitiéndoles acceder a ella.
Daniel Colson, director ejecutivo del Instituto de Política de Inteligencia Artificial, dijo que:
“Los votantes están preocupados por el avance de la IA, pero no por el hecho de que Estados Unidos se quede atrás de China; les preocupa cuán poderoso puede llegar a ser, qué tan rápido puede hacerlo y cuántas personas tienen acceso a él”.
Por tanto, el estadounidense medio tiene bastante miedo a la IA, pero sobre todo, a que las empresas de su propio país hagan con ella lo que no deben, o se les escape de las manos, al menos según esta encuesta, puesto que una IA demasiado inteligente, más que el ser humano, podría dominarnos de una forma tan sutil que, visto el nivel intelectual medio que tenemos en el planeta, no le sería demasiado difícil obtener el control de las masas sin disparar una sola bala.