Razer tendrá que pagar 1,1 millones por mentir con su mascarilla Zephyr RGB: no tenía certificación N95 contra el COVID
Hace ya más de 4 años que la pandemia COVID-19 llegó y en el momento en el que lo hizo, nuestras vidas cambiaron completamente. Tuvimos que estar obligados a respetar la distancia de seguridad, lo que nos impedía hacer la vida social de antes y ante todo, nos tocaba estar con la mascarilla puesta en todo momento. En esos momentos, varias compañías aprovecharon para lanzar sus propias mascarillas, para así captar nuevos clientes interesados. Razer fue una de ellas y hace unos años lanzó una mascarilla llamada Zephyr RGB por 99 dólares, pero debido a que esta no poseía la certificación N95 necesaria, ahora la compañía tendrá que pagar 1,1 millones de dólares.
La pandemia nos pilló a todos por sorpresa, pues no sabíamos como actuar o que hacer. Todos los países del mundo se pusieron de acuerdo a la hora de limitar el contacto entre humanos para evitar el contagio. También se puso como normativa utilizar mascarillas en todo momento, una obligación que hasta hace poco había que cumplir debido a que los casos de coronavirus se incrementaban sin parar.
Razer está obligada a pagar 1,1 millones de dólares a los clientes que compraron sus Zephyr RGB sin certificación N95
Fue en 2021 cuando Razer anunció su mascarilla Zephyr RGB, la cual consideraban como un "purificador de aire portátil". El objetivo era poder tener una mascarilla que nos hiciera estar seguros, a la vez que podíamos salir a la calle y socializar equipados con esta mascarilla de estética futurista. La compañía americana empezó sus pruebas a mediados de 2021 antes de que esta mascarilla se pusiera a la venta por 99 dólares y a pesar de todo, no cumplió con lo prometido.
Razer anunció que su Zephyr RGB tendría la certificación N95, algo que sin duda aumentaría el interés y las ventas de todos aquellos clientes que quisieran usarla como alternativa a las mascarillas de tela. Sin embargo, esto no llegó a cumplirse y ahora Razer debe asumir las consecuencias. La Comisión Federal de Comercio de EE.UU. (FTC), obliga a Razer a pagar 1,1 millones de dólares, los cuales irán dirigidos a los clientes estadounidenses que la compraron y que fueron engañados.
Razer no realizó las pruebas de la FDA para certificar sus mascarillas con protección adecuada para el COVID
Aunque la mascarilla Zephyr RGB de Razer tiene un diseño muy gamer con una estética agresiva, al parecer tuvo bastante éxito de ventas. Visto por lo que tiene que pagar como indemnización, al parecer se vendieron 11.000 de estas o puede que incluso más. De hecho, Razer lanzó una versión mejorada de esta denominada Zephyr Pro, la cual incluía micrófonos y altavoces integrados, permitiendo amplificar la voz de las personas que la utilizaran.
Ahora se ha confirmado que Razer ni siquiera sometió a la mascarilla y los filtros intercambiables a las pruebas de la FDA y el NIOSH para poder obtener la certificación. Esto se aplica a ambos modelos, por lo que comprar la más nueva y cara no añadía el N95 necesario. Además de devolver los 1,1 millones de dólares, Razer tendrá que pagar 100.000 dólares más y obliga a Razer a no volver a engañar sobre la protección contra enfermedades de sus productos, salvo que la FDA certifique que cumplen con lo necesario. En Europa las Razer Zephyr RGB no se vendieron bajo la certificación FFP2, por lo que podrían librarse de una multa aquí.
Razer se pronuncia oficialmente
“No estamos de acuerdo con las acusaciones de la FTC y no admitimos ningún delito como parte del acuerdo. Nunca fue nuestra intención engañar a nadie y decidimos resolver este asunto para evitar la distracción y la interrupción de los litigios y continuar centrándonos en crear excelentes productos para los jugadores. Razer se preocupa profundamente por nuestra comunidad y siempre busca ofrecer tecnología de maneras nuevas y relevantes.
El Razer Zephyr fue concebido para ofrecer una opción de cobertura facial diferente e innovadora para la comunidad. Las declaraciones de la FTC contra Razer se referían a partes limitadas de algunas de las declaraciones relacionadas con el Zephyr. Hace más de dos años, Razer notificó proactivamente a los clientes que Zephyr no era una máscara N95, suspendió las ventas y reembolsó el dinero a los clientes".