China se quiere hacer con parte de la industria del automóvil europea: Huawei se acerca a Mercedes y Audi

Otra cosa no, pero China lo tiene claro, clarísimo de hecho. Va a por Europa como segunda al mando de occidente. Nuestro continente en lo tecnológico destaca en dos industrias: semiconductores y automóviles. La primera pilla lejos todavía para los de Xi Jinping, pero en la segunda nos están dando un meneo, viniendo desde abajo y a un ritmo que nadie excepto Tesla está siguiendo. Por ello, el siguiente paso es obvio: intentar entrar en la inversión de las grandes compañías de coches, en concreto, Huawei hacia Mercedes y Audi.

De tontos no tienen un pelo los chinos. Sin levantar revuelo y con millones encima de la mesa se hicieron con Volvo y ahora pretenden ir a por dos lobos heridos como son Mercedes Benz, pero sobre todo Audi. Los de la estrella de tres puntas están sacando la cabeza del agua y se están moviendo rápido, pero los de los cuatro aros... Huele a hecatombe de un gigante, y China lo sabe...

Huawei quiere entrar en Mercedes y Audi con su software y hardware

Lo están comprando todo y Europa no se está protegiendo, aunque vamos espabilando a base de bien y puede que no sea tarde. El coche eléctrico ha pillado a la UE y sus empresas con "los pantalones bajados" y China, mucho más rápida de movimiento y con más previsión a largo plazo está liquidando nuestra industria, donde las marcas que podían competir con precio/calidad, como SEAT, van a ser liquidadas.

Ni Dacia se salva, imaginemos cómo está el mercado de entrada al coche eléctrico en Europa con precios de poco más de 20.000 euros de las marcas tradicionales: inexistente. En gama alta o premium, como cada uno prefiera, Huawei quiere comprar pequeñas participaciones para meterse en el segmento del hardware y software de automóviles inteligentes y ampliar su catálogo fuera de China.

Esto ocurre tras el hecho de que hace un mes Huawei escindiera su negocio de Soluciones Automotrices Inteligentes (IAS o Intelligent Automotive Solution) para convertirse en el dominante dentro de dicho hardware y software a nivel mundial para coches EV.

IAS (Huawei) ya vale entre 28 mil millones y 35 mil millones

No tenemos que ver esta empresa filial de Huawei como algo pequeño, sino como un gigante que ahora camina bastante más solo. La compañía china, según se informa, tocó en las últimas semanas a la puerta de Mercedes Benz y dos fuentes afirman que se le ofreció una participación del 3% y del 5%, pero según se ha sabido los alemanes no están interesados. Prefieren seguir con su software y hardware que contratar a un proveedor, algo lógico, puesto que dominan el mercado mundial por encima de Tesla, pero Audi...

Audi, el grupo VW en general, pero en específico esta filial de coches premium, están en un momento muy difícil. Sin coches propios a presentar en 2024 dentro de los eléctricos puros han tenido que comprar un modelo a los chinos para tener algún lanzamiento. Impensable hace solo un año. Dos fuentes han comentado que Audi sí que ha escuchado a Huawei y planean una asociación para desarrollar tecnologías de conducción autónoma para los alemanes.

Como no hay proyectos de coches eléctricos pese a que la necesidad es acuciante en 2024, las tecnologías no llegarían para Europa, sino para China, y en 2025, de manera que los ingenieros alemanes aprendan de los chinos y puedan comenzar su camino, ver para creer.

De hecho, el grupo VW en su conjunto ha tenido que hacer algo similar con Xpeng.

China no quiere depender de nadie e invierte como loca para hacerse con el mercado mundial

En cambio, las marcas más grandes de China en EV, como son NIO y BYD, tienen su propio hardware y software, mientras Europa está confiando en su mayoría en empresas americanas como Google, Qualcomm o Mediatek en menor medida. ¿Está tocado de muerte el grupo Volkswagen? ¿Puede acaso Mercedes Benz, Audi o BMW competir con el empuje de las marcas chinas sin Huawei o Google? Y por último, ¿pueden las marcas europeas generalistas comenzar a fabricar coches eléctricos por 20.000 euros o menos en un plazo de dos años como máximo?

La industria está en juego en todos sus estratos, veremos si Europa terminará por sentarse a morir o emergerá como el gigante que fue.