China se enfrenta a EE.UU. en una lucha legal por las baterías de los vehículos eléctricos
China y Estados Unidos no han tenido una buena relación desde hace años, con frecuentes luchas entre ambos países, aunque el gigante asiático acaba perdiendo. Ya lo vimos cuando EE.UU. acabó prohibiendo la venta de hardware a China y esta ha tenido que crear sus propios chips para salir adelante. Las restricciones continúan, ya que la administración Biden de EE.UU. planea limitar la cantidad de componentes procedentes de China en las baterías.
La mayoría de dispositivos electrónicos se fabrican en China, pues este país cumple una serie de condiciones que lo hace ideal. La mano de obra es mucho más barata que contratar a trabajadores locales, sean americanos, europeos, japoneses, australianos u otros. Al final este es un factor fundamental para reducir el coste y aumentar los ingresos. Por otra parte, los empleados chinos suelen trabajar muchísimas horas, con pocos descansos. Así pues, se describe la experiencia de trabajo allí como una de las más duras en el mundo laboral. Sin embargo, China ha sido frecuentemente golpeada por Estados Unidos y sus acusaciones de espionaje y robo.
China acusa a Estados Unidos de infringir las normas por limitar el uso de materiales chinos en baterías
Las marcas chinas generalmente copian el diseño o funcionalidades de otros productos, pero los venden mucho más baratos. Aunque la mayoría de compañías tengan ese tan conocido "Made in China", al final esas marcas son mucho más caras y a su vez, también más conocidas. Depender de China para producir prácticamente todo está empezando a pasar factura y más cuando EE.UU. está imponiendo sanciones. Ya hemos visto que en el sector del hardware, compañías como AMD están invirtiendo cientos de millones en la India, para así librarse de futuros problemas.
Ahora hay una nueva disputa, ya que Biden quiere limitar la cantidad de materiales chinos empleados en las baterías y China asegura que esto se trata de una infracción de las normas de comercio internacional. La administración Biden dijo que los inversores de la cadena de suministro de vehículos eléctricos de EE.UU., no podrán optar a créditos fiscales si usan más del mínimo permitido de materiales procedentes de China.
China posee casi el 66% de la capacidad mundial de procesamiento de litio
He Yadong, portavoz del Ministerio de Comercio chino, indica que EE.UU. está excluyendo a las empresas chinas del sector de las baterías, utilizando las subvenciones como argumento. Califica la política de los Estados Unidos como discriminatoria y en estos momentos la Comisión Europea se encuentra investigando si los fabricantes chinos se ven afectados. Mientras tanto, los estadounidenses han aprobado dos leyes que les permitirán beneficiarse de 6.000 millones de dólares en créditos fiscales para baterías y minerales. También habrá una subvención de 7.500 dólares por cada nuevo vehículo creado.
Estas normas afectarán tanto a China como a otros países de la lista FEOC (entidad extranjera preocupante) como son Rusia, Corea del Norte e Irán. Tanto los estadounidenses como los europeos están preocupados de que el gigante asiático controle totalmente el mercado. Actualmente, China dispone del 75% de la capacidad mundial de procesamiento de cobalto. También tiene casi un 66% de la de litio, componentes esenciales en las baterías.