Apple muestra por primera vez el laboratorio donde fabrica los chips de los iPhone y Mac
Apple ha estado dedicada a crear dispositivos únicos que la diferencian de las demás marcas. No solo el diseño es propio de la compañía, sino que su interior es único. Esto es algo que podemos decir desde hace relativamente poco tiempo, puesto que Apple por fin abandonó a Intel y AMD incluso en sus Mac Pro más potentes. Una reciente entrevista muestra por primera vez uno de los laboratorios donde Apple desarrolla sus chips personalizados para iPhone, iPad y Mac.
Los iPhone se lanzaron en 2007 y fueron toda una innovación en su día, ya que no había realmente ningún rival contra ellos. Pero mucho antes de esto, tenemos los Apple Mac, cuyos orígenes se remontan a principios de 1984. Desde esa primera generación de Mac, hemos visto muchas variantes orientadas a PC de alto rendimiento y portátiles. En la década de los 90 vimos esos primeros prototipos de ordenadores portátiles con Macintosh Portable y más delante el PowerBook 100, un portátil en miniatura a 16 MHz. También vimos que a principios de los años 2000, llegó el iMac G4, el que sería el inicio de lo que consideramos como PC AIO (All in One).
Apple muestra uno de sus laboratorios donde se prueban chips para iPhone, Mac y el resto de dispositivos
A día de hoy, estos ordenadores de Apple siguen existiendo, pues el iMac persiste y los portátiles MacBook son más populares que nunca. Todos estos se han actualizado y ahora emplean los chips de Apple. La compañía de la manzana mordida ha estado desarrollando sus propios chips desde 2008, pues el primer iPhone de 2007 usaba un procesador Samsung a 90 nm. Al año siguiente, Jonhy Srouji se puso a trabajar en el primer chip personalizado para iPhone, con la experiencia previa que tenía en Intel e IBM. En aquel entonces, Apple solo tenía 40-50 ingenieros dedicados a la creación de chips, por lo que el equipo era pequeño comparado al actual.
Dos años después, Apple lanzó su primer chip personalizado, el A4, que acabó dando vida al iPhone 4 y al primer iPad. Si avanzamos hasta el día de hoy, el equipo de Apple Silicon tiene a miles de ingenieros que trabajan en laboratorios de todo el mundo. En la CNBC han tenido el honor de visitar uno estos "laboratorios de chips" como Apple los menciona. Lo primero que llama la atención es que hay decenas de máquinas que están probando los chips M3 de MacBook y los A17 Pro de iPhone 15. Además de estos chips de la gama M y A, la compañía también diseña los de la gama S para Apple Watch, los H y W para AirPods, los U para el AirTag y por último los R (R1) para las gafas Vision Pro.
Al no vender sus chips a clientes externos, Apple puede centrarse en optimizar el rendimiento y escalabilidad
Según Srouji, una de las claves de Apple para ofrecer un gran rendimiento y eficiencia en sus chips se basa en un concepto simple y es que, no fabrican procesadores para clientes. Apple no vende sus chips a otros y por ello, se centran en su producto y buscan conseguir lo mejor de cada versión. Además, esto les permite desarrollar chips con arquitectura escalable que puedan adaptar a varios de sus productos. Gracias a este enfoque, podemos ver como los chips M1, M2 y el M3 reciente se pueden emplear en iPad al igual que en portátiles MacBook Air o MacBook Pro, subiendo los núcleos de CPU y GPU si hay más capacidad de refrigeración.
Aunque Apple ha logrado crear SoC con un gran rendimiento y eficiencia para portátiles, smartphones y PC, hay chips que no han ido bien. El desarrollo de su propio módem 5G fue cancelado recientemente y seguirá dependiendo de Qualcomm. Por otro lado, la compañía quiere lanzar en un futuro chips Wi-Fi y Bluetooth propios, aunque por ahora depende de Broadcom.