Los disipadores para SSD alcanzan su pico: transforma tu SSD en un Fórmula 1
Con la llegada de los SSD PCI-Express 5.0 lo hemos visto todo, salvo la culminación de la evolución: transformar tu SSD en un vehículo de Fórmula 1. Hemos pasado de pequeños disipadores de aluminio a generosos disipadores enteramente fabricados en cobre, o ver un disipador de CPU por aire adaptado para el SSD. Así que entendemos que transformar completamente el diseño de tu SSD, además de ofrecer un diseño aerodinámico, ya podemos decir que hemos tocado el techo de la tecnología.
Si a eso le sumamos que el disipador está pintado de rojo, pues evidentemente, el rojo aumentará la velocidad de la transferencia de datos. Aunque la compresión de las imágenes siempre afecta más al color rojo, por lo que se ve más pixelado. Único punto negativo.
Así luce este disipador / carcasa externa para SSD inspirado en un F1
Fuera de bromas, bajo el nombre de Jeyi ThunderRate, FanlessTech se encontró con un disipador de aluminio con forma de F1 pintado en rojo. Jeyi se trata de un variopinto fabricante chino que ofrece diseños de aluminio bastante curiosos como este vehículo que podríamos definir como un disipador en forma de "Hot Wheels".
Lo "mejor" de todo, es que este disipador puede usarse para aprovechar un antiguo SSD M.2 para transformarlo en un SSD externo. Es ahí cuando ya tiene sentido sus cuatro ruedas transparentes. Sí, estas pueden girar, por lo que si te aburres puedes usar tu SSD tanto para almacenar información como para jugar un rato. Además, mientras juegas, favoreces a que la temperatura baje más rápido tras su uso. Todo son ventajas.
Poco hay que hablar sobre el diseño, pues se trata de aluminio cortado con una máquina CNC para emular el diseño de un vehículo de Fórmula 1. Esto implica generosos alerones e incluso pontones. En su interior, el "motor" es una controladora Realtek RTL9210B-CG que soporta los protocolos NVMe y SATA. Tras conectar el SSD en su interior, y esconderlo bajo un fondo plano de aluminio, se completa este SSD externo perfectamente refrigerado. Para aprovechar el máximo la unidad de almacenamiento que instales, se ofrece un puerto USB-C 3.2 Gen 2.
Quizás lo peor de todo, es que la broma deja de gustar cuando hablamos del precio. El ThunderRate está a la venta en varias tiendas de China a un precio al cambio de 50 euros. Poco más del doble de lo que cuesta de media una carcasa externa para disipadores M.2. Eso sí, no tan bien refrigerados, y menos aún con un coche de Fórmula 1 pintado de rojo. Por lo menos es una curiosidad que por ahora es exclusiva del mercado asiático.