Rusia comprará de segunda mano las GPU NVIDIA H100 para IA que no quiera China para crear superordenadores
Rusia necesita hardware, pero tiene toda importación del mismo cortada, vetada, por todas las vías posibles, hacia su país. El mercado negro suministra alguna cantidad de este material tan preciado, sobre todo recambios y piezas varias, pero como ninguna empresa americana o europea vende directamente al país de Vladimir Putin, y este se está quedando totalmente atrás en IA, la solución para por algo inteligente: Rusia comprará GPU NVIDIA a China de segunda mano para poder montar sus superordenadores, 10 en concreto para 2030.
El problema está en el aire y una vez más el binomio China/Rusia entra en juego. Si los de Xi Jinping están jugando con fuego con EE.UU., los acuerdos que se dieron a conocer y en breve se van a materializar no sentarán bien en el seno de la Administración Biden, porque Putin quiere colocar hasta 10 SuperOrdenadores en la lista de los mejores 500 para 2030.
Rusia se verá obligada a comprar de segunda mano el hardware de NVIDIA a China para su SuperOrdenador
Es una hipótesis que está corriendo como la pólvora tras conocerse las pretensiones de los rusos, y donde parece haber un vacío legal en las condiciones de EE.UU. a China. La reventa de material en propiedad parece no estar contemplada en las estrictas medidas americanas, o al menos, no las hemos encontrado, así que la alianza entre estos dos países comienza a dar sus frutos.
Estos 10 SuperOrdenadores que quiere colocar Putin en la lista de los 500 mejores del mundo para dicho año 2030 necesitarán, ojo al dato, entre 10.000 y 15.000 GPU NVIDIA H100. No podrán ser H800 o A800, ni tampoco la vetada A100, porque la potencia de cálculo máxima es necesaria para poder estar en dicha fecha dentro de la lista para dentro de 6 años.
Y es que en poco más de esos 6 años el hardware dará, al menos, dos saltos tecnológicos más, así que no pensemos que será fácil igualmente. Desde una perspectiva de la potencia, estamos hablando que Rusia tendría la capacidad de crear con sus ingenieros de hardware y software un SuperOrdenador para dar vida a un ChatGPT ruso, sin problema, en la versión 3.5 actual.
Trusted Infrastructure se lanzará a por el proyecto
En principio, se habló de que Rusia y Trusted Infrastructure conseguirían las H100 mediante contrabando, pero claro, el volumen de GPU es altísimo, la oferta es ridícula y está asignada para grandes empresas de EE.UU. y Europa, por lo que, ¿cómo van a conseguirlas en menos de 6 años?
Pues aunque entren en segundo término porque se lance el GB200, igualmente el H100 caerá de precio y las empresas seguirán comprándolo, por lo que la situación será parecida al reducirse su volumen de fabricación. La solución, al parecer y según los rumores, corre a cargo de China, su gran aliado.
Las empresas chinas que vayan actualizando hardware irán quitando las H100 que hayan obtenido y podrán las Blackwell más nuevas disponibles, permitiendo recuperar parte de la inversión con la venta a Rusia. Con los precios actuales de las GPU de NVIDIA la empresa que quiere montar Rusia con esto costaría la friolera de 6.000 millones de dólares. Con el movimiento de China saldrá mucho más barato y económico, y más si después puede adquirir también en el mercado negro más H100.
Se estima que los costes podrían bajar entre 500 millones y 700 millones de dólares aproximadamente. Con ello, y sumado a las más de 1.592 NVIDIA A100 que ya tiene Rusia en el Chervonenkis (TOP 27 mundial en estos momentos), Putin intentará no quedarse demasiado rezagado en todo lo que tiene que ver con la IA.