NVIDIA da marcha atrás con las RTX 50: serán chips monolíticos por culpa de TSMC

Todo lo que se especuló y filtró hace semana y media acaba de venirse abajo. Nueva información tras los acontecimientos que hemos ido describiendo con los problemas de TSMC han hecho reflexionar a NVIDIA con la nueva arquitectura Blackwell, y a tenor de lo filtrado, el sueño de una serie de chips MCM para gaming acaba de dar un vuelco. Huang acaba de decidir que las gráficas para gaming, es decir, las RTX 50, serán chips monolíticos como hasta ahora han sido sus predecesoras.

Hay dos confirmaciones con esto, una directa y otra indirecta, pero todos los sueños sobre un competidor MCM contra AMD se han disuelto de un plumazo, y curiosamente, los rojos tienen gran parte de culpa en el cambio de estrategia de NVIDIA, donde todo está sucediendo muy rápido y en plazos muy cortos.

El problema de TSMC y su capacidad de producción de package hace que los chips de las RTX 50 sean monolíticos

No entraremos en demasiados detalles, pero la realidad que hemos visto con TSMC se está llevando por delante la estrategia de NVIDIA, donde además, los verdes tienen clara su prioridad: la IA. La FAB en Taiwán empezará la construcción, si todo va bien, en poco más de una semana, pero hablamos de finales de 2023, con una terminación, como comentamos en su momento, para principios de 2025.

Fechas muy similares a lo que se verá en EE.UU. (con retrasos) y Europa. Los objetivos son dispares, pero en cuanto a NVIDIA los de Taiwán necesitan aumentar la capacidad de producción de package... Y no lo van a conseguir al volumen que precisa Huang. Por ello, y tras valorar Intel y Samsung, este último con un contrato en vigor para las H100 por lo dicho de TSMC en este año y su capacidad limitada, Jensen Huang ha tomado la decisión de no seguir por el camino del MCM para las GPU destinadas al gaming.

Por lo tanto, el GB100 sí que será MCM, así como sus variantes para Compute Cloud, mientras que todos los chips para gaming serán tradicionales, monolíticos. Debido a esto, el diseño de las cachés y los buses se cambiará y adaptará de forma tradicional. Además, la capacidad de producción para el N3P y N3X ha aumentado al dejar Apple líneas libres para estos nuevos nodos tras reducir su número de pedidos para sus chips a 3 nm.

AMD y su enfoque para RDNA 4

La decisión se ve amparada por el hecho de que AMD no competirá con las nuevas GPU RDNA 4 en la gama alta, como ya hizo con las RX 5000 en su momento. Ajustará costes, rendimiento por chip y competirá de nuevo en rendimiento por vatio en precios competitivos. Eso sabiendo que el coste de las obleas está disparado.

Actualmente hablamos de más de 20.000 dólares por una destinada a los 3 nm de TSMC, así que, aunque hay un salto de densidad interesante con el N3P y N3X, así como de rendimiento, la tasa de éxito y dicho coste por oblea harán que el precio unitario por chip sea alto en los modelos de gama alta con más área total usada, debido a sus mayores capacidades y potencia.

En otras palabras, un chip de gama media y sus variantes de gama media-baja es lo más óptimo de fabricar en rendimiento/precio de cara al usuario, y curiosamente, como dijo AMD hace más de un mes, la gama baja pierde fuelle, porque el coste/rendimiento para crear un chip es menor y así seguirá siendo a cada generación que pase.

Por último, y volviendo a NVIDIA, el hecho de que la compañía haya cambiado de idea, por lo dicho tiene una ventaja, y es que las GPU RTX 50 no se lanzarán a principios de 2025, sino que será en el segundo semestre de 2024, seguramente por estas fechas de septiembre u octubre de dicho año.