El asesor económico de Donald Trump sobre el coche eléctrico: «La gente no los quiere, si la tendencia continúa será un gran fracaso»
Duras declaraciones del economista de renombre Stephen Moore, ex asesor económico de Donald Trump cuando este llegó al poder en EE.UU. El coche eléctrico es el futuro según dieron tanto la UE como Estados Unidos, China se ha lanzado de cabeza a por él de una forma descontrolada, Corea del Sur está inmersa en el cambio y Japón... Es reticente en parte. Moore avisa sobre el coche eléctrico catalogándolo como un gran fracaso si la tendencia actual sigue su curso, porque "la gente no los quiere". ¿Lleva razón?
Moore ha puesto encima de la mesa una comparativa que tiene por protagonista al Ford Edsel, el cual tuvo varias particularidades y terminó siendo un fracaso. ¿Por qué? Porque todos los ejecutivos de Ford dijeron en 1950 que la gente estaría como loca por comprar el coche, produjeron medio millón, pero se olvidaron de preguntar a sus potenciales compradores. El coche era vanguardista, pero fracasó. La comparación con el coche eléctrico de Moore se basa en este ejemplo, pero, ¿qué afirma en concreto?
Stephen Moore: "La gente no quiere el coche eléctrico, podría ser un fracaso"
El Edsel de 1950 se lanzó en 1958 y no tardó ni un año en cancelarse. Moore lo explica el símil con la industria actual del coche eléctrico así:
"El Edsel es sin duda uno de los mayores fracasos que la industria automotriz haya visto jamás, y lo que les digo ahora es que si las tendencias actuales continúan, veremos que el mercado de vehículos eléctricos se convierte en el próximo gran perdedor porque los compradores de automóviles no quieren coches eléctricos"
Hay que tener en cuenta lo que hemos ido viendo en las últimas semanas: Toyota y GM rompen su acuerdo para diseñar coches eléctricos baratos, Ford cancela inversiones de 12.000 millones, Tesla no sigue adelante con la FAB de México hasta nueva orden y sube los precios y el resto de la industria europea está guardando silencio tras intentar ponerse al día.
En China las marcas están cayendo como moscas y solo quedarán unas pocas con todo el mercado, especialmente BYD. Para rematar, aquellas que son veteranas en el sector están presentando en casi todos los casos pérdidas en las divisiones de coches eléctricos, y otras tantas están recortando producción. Es decir, no se está ganando dinero salvo Tesla y BYD, las únicas rentables y por distintos motivos.
Un gasto en inversión desmedido de Europa, EE.UU., China y Japón
Los cuatro grandes, con permiso de China que acaba de llegar, están inyectando dinero a espuertas, y no solo a los fabricantes de coches, sino a los fabricantes de baterías, pieza clave para poder ofrecer el coche eléctrico. Moore afirma que:
"Para que la gente compre coches eléctricos, el gobierno federal ha estado ofreciendo varios incentivos. Básicamente, por cada coche eléctrico comprado, el gobierno dará un subsidio de 7.500 dólares. No olviden que también estamos subsidiando a las empresas de baterías.
Lo más sorprendente es que, incluso con estos edulcorantes, los estadounidenses siguen diciendo: no los quiero (a los coches eléctricos). Y los contribuyentes están pagando por estas cosas".
Moore termina el relato con un dato revelador. Y es que asegura que los almacenes de los automóviles de las compañías en América están llenos de vehículos eléctricos, y afirma que solo el 10% de los estadounidenses está dispuesto a comprarlos:
"Creo que sería mejor para las compañías automotrices cambiar a vehículos híbridos, que usan gasolina y baterías eléctricas. Pero las compañías automotrices no fabrican estos autos en grandes cantidades. La razón por la que no lo hacen es porque el gobierno fuerza una demanda cada vez mayor lanzando el mensaje de que todos los automóviles tienen que ser completamente eléctricos."
Toyota, Mazda y Honda no lo ven claro
El coche eléctrico es ya una pieza de hardware de alto nivel y extremadamente cara, que la usamos en vez de para trabajar o jugar, para desplazarnos. Pero desde Japón Toyota y Mazda avisaron de que era mucho más productivo y rentable ofrecer coches híbridos, como sugiere Moore.
Sobre todo por las baterías. Con una batería de un coche eléctrico de gama media Toyota puede crear 100 Mild Hybrid y ofrecer rentabilidad. Dados los altos precios, lo que duran las baterías y cómo degradan, el coste de sustituirlas y la autonomía, ¿es realmente el coche eléctrico una opción o un fracaso anticipado?
En otros países cargarlos es accesible, pero en un país como España, ¿cómo va a cargar todo coche eléctrico que duerma en la calle? ¿De dónde saldría esa cantidad de energía? Francia está creando nucleares a todo tren, Alemania ha abierto las minas de carbón y está con las renovables y en nuestro país la inversión en esta energía verde también despega, pero no será suficiente...
Gorrito de plata "inside" a partir de aquí. ¿Ha sido todo algo premeditado de EE.UU. y la UE para que China gastase tiempo y miles de millones en cientos de empresas para liderar un sector que no es factible en occidente? Si lo han hecho premeditadamente, hay que quitarse el sombrero. Si el movimiento no fue bien pensado, son unos completos inútiles.
No queda tanto para 2035 y los pilares en occidente se tambalean con un sector que se está frenando, mientras que China comienza a ver que, quizás, no es posible mantener el ritmo, ventas y beneficios con el coche eléctrico con los estándares de seguridad europeos. Quizás estemos ante una burbuja que puede explotar y que solo puede ser mantenida por los coches premium y de lujo.