Crean una nariz gigante con una Raspberry Pi y una IA capaz de «olfatear» objetos

Siempre hablamos de nuestra sociedad y lo mucho que ha avanzado con la IA y la tecnología actual. Siempre se da una cierta seriedad a todo esto, pero en ocasiones toca hablar de algunas invenciones bizarras que la gente hace. Esta vez se trata de una nariz gigantesca que tiene en su interior una Raspberry Pi y es capaz de olfatear y describir los objetos.

La Raspberry Pi es considerado el ordenador monoplaca más popular de todo el mundo. Esta es una placa base que tiene todo incluido, desde el procesador, memoria, puertos y conectividad, que junto a un bajo precio la hacen una opción muy atractiva. No solo eso, sino que si pensamos en la inmensidad de proyectos que se pueden hacer con una Raspberry Pi, la lista sería interminable. Sin embargo, el proyecto que tenemos ahora es quizá de los más extraños que hemos visto.

Crean una nariz gigante con una Raspberry Pi capaz de "olfatear" objetos

Por extraño que parezca, tenemos una escultura de una nariz gigante creada por el artista y desarrollador Ardan Aga. Esta nariz no es una simple escultura sin más, pues interacciona usando una Raspberry Pi en su interior. Lo curioso es que la función que cumple es poder olfatear los objetos que le pongamos debajo de la fosa nasal. Sorprendentemente esta nariz hace el ruido de que olfatea y poco tiempo después literalmente expulsa un papel que describe el objeto.

Podríamos pensar que esto es toda una obra maestra de la tecnología y han conseguido hacer un dispositivo que es capaz de identificar objetos por el olor. Pero esto no es del todo así, pues como todo tiene truco, empezando por la propia Raspberry Pi. Como ya sabemos, podemos añadirle distintos accesorios y conectarle todo tipo de módulos. Pues bien, en este caso se ha añadido un módulo de cámara y por ello, más que oler, lo que está haciendo es identificándolos gracias a las imágenes.

Utiliza una cámara y la IA GPT-4 para describir las imágenes que captura

Nariz Raspberry Pi olfateo

Ahora bien, ya hemos desvelado el misterio del olfato, pero nos queda averiguar como es capaz de hablar y describir el propio objeto. Por si no te habías dado cuenta, la inteligencia artificial es capaz de hacer esto con gran exactitud y efectivamente, la nariz con Raspberry Pi usa también la IA GPT-4. Este modelo de lenguaje es el último de OpenAI y el más avanzado que tenemos actualmente, dando vida a ChatGPT y proyectos muy diversos. De hecho, hace poco hablamos de como los investigadores de NVIDIA usaron GPT-4 en Minecraft con grandes resultados.

En este caso concreto que concierne la noticia, las imágenes captadas por la cámara de la Raspberry Pi 4 son descritas por GPT-4 sin ninguna dificultad. De hecho, podemos ver que su resumen no solo es acertado, sino que el objeto es descrito de forma casi poética. Para todos aquellos que quieran probar suerte usando esta nariz gigante con Raspberry Pi 4 e IA, la escultura se encuentra en la galería Olfactory Art Keller de Nueva York. Como curiosidad final, en el papel que imprime con la descripción, pide por favor que no lo estiremos (como si fuesen pelos) si no queremos hacerla llorar.