EE.UU. y Japón se alían contra Corea del Sur y China: trabajarán en chips de vanguardia
Se veía venir y ha terminado siendo. Corea del Sur ha "traicionado" a EE.UU. al aceptar la oferta de China para proveerla de semiconductores, sobre todo memoria de distintos tipos, puesto que tras el bloqueo a Micron quedó una importante vacante en el mercado que van a cubrir Samsung y SK Hynix, los cuales están presentando pérdidas mil millonarias actualmente. Visto el movimiento, EE.UU. ha cerrado un importante acuerdo con un socio clave como es Japón: crearán chips de vanguardia.
Es otro polo distinto, otra segmentación del mercado, el mundo se está polarizando y como venimos diciendo desde hace más de un año, se acabó la globalización como la conocíamos. Es la guerra fría 2.0 llevada un paso más allá que definirán los próximos 20 o 30 años, donde unos quieren aplastar a otros y la tecnología es el pie de mayor tamaño junto con la energía. ¿Quién va "ganando"?
EE.UU. y Japón sellan un fuerte acuerdo a largo plazo con los chips
Es oficial, el movimiento de Micron a Japón donde invertirá, como vimos esta misma semana, 3.600 millones, era el preámbulo de lo que estaba por pasar. Y es que EE.UU. y Japón a través de altos funcionarios de comercio de ambos gobiernos ha terminado por rubricar un acuerdo de cooperación y desarrollo al más alto nivel para los semiconductores de la próxima generación.
Fue el viernes cuando la controvertida Gina Raimondo se reunió con Yasutoshi Nishimura, donde el acuerdo firmado hace referencia a alentar el crecimiento de los centros de investigación para chips en ambos países. Es decir, EE.UU. irá a Japón y Japón irá a EE.UU. para crear nuevos emplazamientos tecnológicos, un acuerdo de igual a igual.
También se dice en dicho acuerdo que habrá una hoja de ruta para el desarrollo tecnológico y de recursos humanos en general. El objetivo de este desarrollo es poder resolver las "concentraciones geográficas de producción" que se ha roto varias veces tras la pandemia en cuanto a la cadena de suministro de semiconductores.
Un objetivo a varias bandas
Es un movimiento, de nuevo, geopolítico, además, bien pensado. EE.UU. quiere parar a China, y lo está consiguiendo, pero además, tiene en el objetivo a Corea del Sur. Japón es el principal suministrador de equipos de fabricación para dicho país, el segundo es EE.UU., por lo tanto, al irse Corea del Sur con China los americanos pueden cortar de raíz en cualquier momento dicho suministro.
Para colmo, el principal creador de obleas del mundo es Japón, y por ello los americanos tienen tan buenas relaciones con ellos en estos momentos ante el desplante de Corea, protegiendo sus inversiones con Taiwán para que su industria nunca tenga una falta de chips como pasó con la pandemia.
El mundo está cambiando, como dijo Intel, ahora el nuevo petróleo son los chips. La pregunta que queda en el aire y que ya podemos intuir es, ¿bloqueará completamente el suministro Japón como está haciendo EE.UU.? ¿Tiene el acuerdo algo vinculante sobre esto? De momento no hay más datos sobre él, pero lo que es seguro es que China responderá de alguna manera.