Softwar: así ve EE.UU. el Bitcoin usado como arma táctica entre países
Por si no te has dado cuenta, estamos en guerra, una guerra encubierta, eso sí. Lo que está ocurriendo en Ucrania sigue dando paso a amenazas veladas indirectas que no hacen más que escalar la tensión entre los dos grandes bloques, ahora perfectamente definidos, que parecen estar preparándose para aumentar el alcance del conflicto militar. Pero se da el caso de una guerra oculta de la que no se está hablando, la económica y esta tiene dos escenarios de juego: el oro y el Bitcoin. El primero está viendo cómo China y Rusia lo atraen en grandes cantidades para intentar imponer el Yuan frente al dólar, el segundo... Sería, posiblemente, el arma definitiva a dos escalas. Así sería la llamada Softwar.
No hay que llevarse a error. La crisis económica que vivimos tiene unos objetivos claros y el principal es mantener al dólar como moneda imperante, aprovechando la coyuntura del sistema, frágil e inepto (porque quieren hacerlo así a nuestros ojos) para implementar las CBDC. Pero ¿Bitcoin no es ya una moneda digital más fuerte y con más recorrido? ¿Qué sentido tiene entonces si le van a hacer la competencia desde los bancos centrales? Pues podría ser más compleja la estampa final que todo esto...
Softwar, la guerra declarada con Bitcoin sin tener que lanzar armas nucleares o drones
Bitcoin como un arma, suena esperpéntico sin duda, pero lo cierto es que es un valor refugio en tiempos de crisis pese a ser altamente especulativo. Un general de los Estados Unidos, Jason P. Lowery, ha lanzado una teoría de guerra llamada Softwar que ha sido realmente sorprendente, porque lejos del tema económico y su coyuntura, este miembro del ejército pone el foco en otro tipo de guerra no vista hasta ahora.
El símil dentro del mundo animal que se propone es el de dos alces con sus respectivas cornamentas, donde se compite por el territorio. Los alces lanzan sus embestidas y chocan, luchando sin llegar a hacerse daño y mucho menos a morir, no es el objetivo, sino dominar el campo de batalla. El informe a modo de libro del general Jason P. Lowery muestra algo similar usando el símil de las astas como Bitcoin, donde el ganador de cada embestida gana Bitcoin y tiene el derecho a publicar el siguiente bloque de transacciones en la red, logrando dominar temporalmente a su rival.
Un sistema de defensa con muchos obstáculos a resolver
Dado que los bancos centrales quieren el control de las monedas de manera digital (Euro Digital, Dólar Digital, Yuan Digital) así como de todo lo que hacemos (motivo real de implementarlas tras toda esta parafernalia económica que han montado donde se les está yendo de las manos con la inflación), el problema radica en cómo van a competir EE.UU y China, Occidente y Oriente, para con Bitcoin.
La teoría afirma que el enfoque es erróneo en estos momentos. Lowery sugiere que la red Bitcoin es algo así como las rutas comerciales marítimas y que el gobierno americano debe proteger la libertad de navegación en la red con urgencia militar. ¿Cuáles serían los problemas para poder dominar Bitcoin como si fuese el Dólar Digital? Pues la descarbonización.
Es un problema energético y aquí hay dos jugadores en el tablero futuro: los chips y los materiales para la infraestructura de energías renovables. Los primeros los va a controlar EE.UU y Taiwán, los segundos China. Entre medias está Europa con la Energía Nuclear curiosamente (ahora parece que es verde) y el hidrógeno, este sí, verde.
Dado que se van a empezar a poner cuantiosas multas por generación de CO2, carbono en general, parece que todos estamos corriendo a ver quién contamina menos para poder multar al resto y coger delantera tecnológica. El problema es que Bitcoin depende en exclusiva de la red y de una cantidad de energía descomunal para ser minado, y claro, aquí EE.UU. domina.
Los chips como arma junto al Bitcoin
Chips más eficientes reducirán el consumo de energía general de los ASIC de minería, o bien, a misma energía consumida darán mucho más rendimiento, pudiendo obtener más Bitcoin. La tesis de Lowery afirma que EE.UU. tiene que acumular Bitcoin y hacer crecer su industria minera, incluso extender las protecciones de la segunda enmienda afirmando que, igual que cualquier americano tiene el derecho a portar un arma como autodefensa, también debería hacerlo con el Bitcoin como sistema económico defensivo.
Y claro, aquí entra Intel a escena con sus chips y ASIC, donde sería el baluarte occidental para subyugar económicamente a China debilitando al Yuan Digital, puesto que USA tendría las dos monedas digitales más fuertes, y además, las dos siguientes a su lado (Libra y Euro). No en vano, ya vimos que, sutilmente, se había propuesto que los bancos guardasen los Bitcoin y no los Exchanges, curioso movimiento cuanto menos...
Pero como hemos explicado, primero debe de haber infraestructura sostenible para ello. La energía nuclear debe despegar de nuevo, las placas solares (90% importadas desde China), así como paneles y motores eólicos (dominio casi absoluto chino) y otras fuentes sostenibles (combustibles ecológicos sintéticos) son la clave para que el movimiento despegue al parecer.
Por ahora, es solo una interesante teoría, no hay demasiados indicios de que el gobierno de Biden se mueva a tal respecto más allá de apostar por la descarbonización progresiva. Europa en cambio está siendo más agresiva en esto y podría jugar una baza con Bitcoin donde nadie se la espera, junto al Euro Digital aprovechando los golpes que se está llevando el dólar como moneda FIAT en todo el mundo de parte del Yuan. En definitiva, la Softwar es una posibilidad visto el hecho de que a Bitcoin ya no se la puede matar y va a estar ahí como lo está el oro. ¿Quién será el primero en apostar por esta criptomoneda cuando se complete el cambio energético hacia el modelo sostenible?