Taiwán desata la guerra de precios en los chips: descuentos de hasta un 20%
Malos tiempos para los fabricantes de chips, malos tiempos para la industria y para el usuario o empresas. Nadie está contento en este momento, los precios no bajan, la demanda no sube, se mire donde se mire solo se ve desconcierto y como siempre, todo se verá a meses vista (como poco). Pero la industria no puede parar y menos en Taiwán, foco principal de los semiconductores mundiales. Por ello, los fabricantes de chips han comenzado lo que ya se ha denominado en la industria como "La guerra de precios por los chips", donde todos están ofreciendo descuentos.
Los niveles de expansión que contrajo la industria a partir de 2020 y tras la pandemia, donde se desató la crisis de los semiconductores ahora dan sus frutos, es decir, está haciendo que todas las empresas entren en números rojos en sus balances financieros. Lo hemos ido viendo en estos dos últimos trimestres y lo peor es que la inversión ya está hecha. Por ello, desde Taiwán y Corea del Sur se llevan moviendo meses para paliar el golpe...
Guerra de precios en los chips desde Taiwán, una amenaza para los grandes
Se suele pensar que los grandes siempre tienen la sartén cogida por el mango, y en parte es así, pero en la mayoría de ella no. Lo que se está viviendo en la isla es una fiebre por captar clientes a toda costa, puesto que empresas como UMC, PSMC o World Advanced, así como otras incluso menores a esta, no se pueden permitir lo que está haciendo TSMC o Samsung.
Es decir, no pueden parar la maquinaria y esperar a que todo vaya volviendo a la normalidad, necesitan producir. El mantra que se vive se podría resumir con un "mientras que vengas a comprar obleas o chips, el precio será más bajo de lo que esperas".
Lo que se está haciendo es lo lógico: ofrecer grandes descuentos que pueden alcanzar el 10% e incluso el 20% del precio fijado hace dos trimestres, ver para creer. Aunque hay que matizar varias cosas.
TSMC e Intel guardan silencio, Samsung ya ofrece descuentos del 10%
Los tres grandes están pasándolo mal, es incuestionable, pero de ellos solamente los coreanos han dicho abiertamente que quien pase pedidos tendrá nada menos que un 10% de descuento. La respuesta desde Taiwán es que no hablan de los contratos de sus clientes (TSMC), pero al mismo tiempo el gigante está viendo como pierde contratos porque los pequeños le están aguando la fiesta con descuentos que pueden llegar al 20%, inasumible para el volumen que necesita un monstruo como TSMC.
Además, estos descuentos están siendo en procesos maduros, que son los que más volumen tienen del mercado y los que menos rentan a Intel, TSMC y Samsung, porque las inversiones no se costean con ellos, sino con los de vanguardia. El problema es ahora mayor, porque es temporada baja y la tasa de utilización de las FAB, sobre todo las de 8 pulgadas, es baja, generalmente no supera el 60% de uso, pero con todo lo dicho podría ser incluso menor, sobre el 50%.
Nadie quiere gastar dinero en pedidos de chips
Por si fuese poco, los pequeños fabricantes están abiertos a ofrecer descuentos todavía mayores al 20% si los pedidos son grandes, haciendo complicado que los tres dominadores del mercado puedan beneficiarse de estos ingresos, porque lo que para una pequeña FAB es un "pedido grande", para Intel, TSMC o Samsung no resulta ni cuestionable en términos logísticos y energéticos, cosa que ahora podrían estar replanteándose ante la crisis de los semiconductores, en su "segunda temporada", que estamos viviendo.
El problema es que la demanda es tan baja que ninguna empresa quiere gastar dinero para acumular inventario, al contrario, están vaciándolos ofreciendo mejores precios para recuperar la mayor inversión posible a base de menores ingresos. Una medida paliativa que tiene en jaque a Taiwán, donde jamás se había visto una guerra de precios similar y a esta escala.