Intel: la adquisición de Tower Semiconductor se retrasa a finales de Junio
Fue a principios de febrero de 2022, cuando Intel anunciaba oficialmente la adquisición de Tower Semiconductor. En concreto, Intel anunció que esperaba cerrar la compra en, aproximadamente, 12 meses, al estar sujeta a ciertas aprobaciones regulatorias y a las condiciones habituales de cierre, incluida la aprobación de los accionistas de Tower. Ya ha pasado dicho plazo, y la adquisición formal de la compañía no ha tenido lugar.
Según los últimos informes, esta adquisición, valorada en 5.400 millones de dólares, aún no se ha cerrado tras casi cumplirse 14 meses del anuncio. El motivo no es otro que la Administración Estatal de Regulación del Mercado de China aún no la ha autorizado la adquisición. Pese a ello, Intel sigue siendo muy optimiza, ya que cree que la adquisición de Tower Semiconductor tendrá lugar a finales del próximo mes de junio.
En concreto, fue Intel Israel la que emitió un comunicado en el que afirmó que seguirá trabajando para cerrar el acuerdo a finales de la próxima semana, pero que es posible que la transacción no se autorice hasta más tarde. En concreto, en algún momento del primer semestre de este año (a finales de junio de 2023).
"Aunque seguimos trabajando de cerrar la transacción de Tower dentro del primer trimestre de 2023, la transacción podría cerrarse en la primera mitad de 2023, sujeta a ciertas aprobaciones regulatorias y condiciones de cierre habituales", reza el comunicado.
La adquisición de Tower Semiconductor: un papel crucial en el negocio de la fundición de Intel
Hay que recordar que esta adquisición ayudará a Intel a ampliar los servicios y clientes en su negocio de fundición por medio de Intel Foundry Services (IFS). Por no hablar de acceder a los procesos de fabricación litográficos maduros de esta compañía. Los procesos maduros ampliamente adoptados se usan en la mayoría de los productos cotidianos. Otra de las ventajas de la adquisición, es hacerse con un equipo de ejecutivos experimentados en la fabricación de chips por contrato. Esto es algo de lo que Intel carece en la actualidad. Lo más interesante de todo, es llevarse a las docenas de fieles clientes que ya posee Tower Semiconductor. Esto implica acceder a una fuente de ingresos estables.
Para que todo esto beneficie a Intel, aún tiene que vérselas con la postura de la Administración Estatal para la Regulación del Mercado de China. Intel está a punto de obtener subvenciones del fondo CHIPS and Science del gobierno estadounidense con la condición de no invertir en China durante los 10 años siguientes a la recepción. Mientras tanto, China quiere que Intel siga invirtiendo en activos chinos e intenta aprovecharse de ello bloqueando potencialmente la transacción. Vamos, que tras la adquisición, tenemos una lucha de intereses de EE.UU. y China.
Junto con el anuncio del abandono de Raja Koduri, Intel nombró a un nuevo ejecutivo al frente de Intel Foundry Service. Se esperaba que este ejecutivo se asignara a Tower Semiconductor después de que su presidente dimitiera en noviembre. Con este movimiento, realmente parecería indicarnos que Intel no confía mucho en que la adquisición tenga lugar. Tocará esperar para ver qué sucede.