Científicos estudian cómo las células cerebrales humanas mejoran la capacidad de las IA

Con el paso de los años, hemos logrado reducir enormemente el tamaño de los chips, pero se ha llegado a un punto donde pronto habrá que acudir a alguna solución alternativa. Por el momento lo más diminuto que tenemos son los chips a 3 nm como los de Samsung, y si bien los 2 nm están previstos para 2024, dentro de unos años no podremos continuar bajando. En este punto parece que nos quedaremos estancados, pero ahora se ha descubierto una solución alternativa para aumentar la capacidad de procesamiento de las IA utilizando células cerebrales humanas.

Cada vez cobra más importancia la creación e implementación de IA en nuestra vida. Estas se han convertido en herramientas fundamentales para ayudarnos a la hora de resolver nuestras dudas, como ChatGPT. Y es que, para qué preguntar a Google sabiendo que nos dará un resultado poco preciso, si tenemos un chatbot en Bing que encima nos resuelve con todo detalle nuestra duda. Otros usos de las IA recaen en la creación de contenido de todo tipo, sea imágenes, textos o audio. Ya hemos visto lo eficiente y rápidas que son IA como Midjourney o Stable Diffusion y esto no es nada si lo pensamos en lo que nos depara el futuro.

Investigan el uso de células humanas combinadas con chips para IA

Organoide celula cerebral

El futuro de las IA es muy prometedor, pero llegará un punto donde el propio hardware, los chips y procesadores limitaran la capacidad de progresar de la inteligencia artificial. Para evitar esto y antes de que sea demasiado tarde, unos científicos han estado investigando vías alternativas para hacer que las IA estén a la vanguardia de la tecnología. Dado que los chips tienen una fecha límite, si nos enfocamos en los nanómetros, se ha indagado sobre complementarlos con "inteligencia organoide" para mejorar las capacidades de las IA.

Nos referimos a un organoide como una versión simplificada de un órgano producido in vitro, por lo que hablaríamos de combinar lo mejor de la tecnología con lo orgánico. Thomas Hartung, catedrático de la Universidad John Hopkins y uno de los coautores de esta investigación, ha reconocido que los ordenadores convencionales son mejores a la hora de realizar cálculos que los humanos. Esto se ha demostrado desde hace mucho tiempo, aunque pone como ejemplo la IA AlphaGo que logró superar al mejor jugador del mundo de Go entrenándose con 160.000 partidas.

Buscan superar las limitaciones y mejorar la eficiencia energética

IA pensativa

Aquí está el problema de la tecnología que ya mencionamos, pues llegaremos un punto donde no podremos disminuir el tamaño de los transistores. En estos momentos, hay que buscar alternativas para seguir incrementando la capacidad y eficiencia energética de las IA. De hecho, compara la energía que necesitó AlphaGo para entrenarse como superior a la necesaria para mantener a un adulto activo durante una década.

Es por ello, que este nuevo método utilizando células cerebrales para potenciar las IA tiene un gran futuro por delante. De hecho, los científicos ya han conseguido crear organoides que poseen 50.000 células. Puede parecer una enorme cantidad, pero Hartung nos confirma que para una que las IA se vean beneficiadas necesitaríamos organoides con más de 10 millones de células. Esto significa que aún se necesitan muchos años para llegar a ese punto, así que el tiempo dirá si realmente lo consiguen al final. Lo que si os dejamos es el artículo donde se detalla toda la investigación por si tenéis curiosidad.