Las placas base Intel B760 podrían ser un 10% más caras que las B660

Cuando hablamos de procesador de PC, tanto Intel como AMD ofrecen a día de hoy CPU muy competitivas y con un alto rendimiento tanto en juegos como en productividad. Sin embargo, con los últimos procesadores Intel Core 13, la compañía ha logrado volver a superar a AMD en rendimiento en juegos, aunque no por mucho. En cuanto al precio, también resultan una opción más barata si tenemos en cuenta la placa base, aunque se esperan subidas de precio para las Intel B760 que se lanzarán próximamente, indicando que estas serán más caras que las B660 actuales.

A la hora de comparar procesadores actuales de AMD e Intel, el precio es la diferencia que más nos afecta, pues en cuestión de rendimiento tanto los Core 13 como los Ryzen 7000 son muy competitivos. Podríamos decir que la principal ventaja de Intel es que se pueden usar placas base de pasada generación y memoria DDR4 para los Core 13 ahorrando dinero en el proceso. Sin embargo, si optamos por esa elección, nos tocará comprar en un futuro RAM DDR5 y quizá una mejor placa para exprimir dicha memoria y aumentar nuestro rendimiento. En el caso de que queramos actualizar a una de la gama B760 que se espera para enero, os advertimos que tendrán un mayor coste.

Las placas base B760 serán hasta un 10% más caras que las B660

ASRock Placas Base Z790 B760

No hace mucho, Intel anunció que subiría los precios de sus CPU y otros dispositivos de la compañía para hacer frente a la difícil situación económica actual. Debido al aumento de los costes de producción, las ganancias se reducían y había que ajustar estos. Que decir que la compañía anunció pérdidas millonarias en varios sectores, sobre todo en el de Intel Foundry Services (IFS). Dicho esto, parece que los incrementos de precio no acaban aquí y también afectarán a las placas base.

Afortunadamente, se espera que la subida de precio sea relativamente pequeña, pues hablaríamos de pagar un 10% más por una placa Intel B760 frente a las B660 actuales. A cambio, las placas B660 llegarían con mejores características y más puertos, aunque como vimos con las Z790, no habrá grandes cambios. Así pues, si quieres comprarte una B760, el precio de esta será entre 10 a 15 dólares superior a la pasada generación.

La falta de competencia de AMD haría que Intel suba los precios

Podemos entender que una nueva generación de placas base sea más cara que la anterior, aunque si vamos a tiendas españolas los precios de las placas base de Intel son algo más caros que en tiendas americanas. Por ello, las placas B660 más baratas rondan los 110 a 130 euros, por lo que una subida del 10% implicaría que veríamos las B760 a partir de los 120 euros para las más básicas y 250 euros o más para las premium. Si estos precios nos resultan caros, nada mejor que ver a su rival AMD, el cual ofrece las B650 por más de 200 euros e incluso más de 300 euros.

De hecho, la más barata que encontramos disponible, es un AsRock B650M PG Riptide por 196 euros. Teniendo en cuenta esto, parece ser que una de las razones por las que Intel sube los precio es por la falta de competencia en este sector por AMD. Pues incluso con la subida de precio del 10% de las B760, Intel tendría ventaja sobre AMD. Aunque hay que decir que todo esto nos hace pensar que las B660 podrían ser la mejor opción y no esperar por una B760 en enero. Y es que, hay que tener en cuenta que las B660 ya soportan memoria DDR4 + DDR5 y los procesadores Intel Core 12 y 13, por lo que cumplen ese propósito para la gente interesada en ahorrarse unos euros.