World of Warcraft: Dragonflight sube sus requisitos, ¿puede con tu PC?

Según pasan los años, los videojuegos cada vez ofrecen unos gráficos más realistas y los requisitos mínimos y recomendados para jugar a estos títulos en PC aumentan cada vez más. Sin embargo, hay excepciones como la última expansión de World of Warcraft, donde no vemos un salto gráfico destacable, pero sus requerimientos suben y bastante. Así pues, con World of Warcraft: Dragonflight los requisitos mínimos y recomendados se incrementan en gran medida, exigiendo un SSD, el doble de memoria, mejor gráfica y procesador.

World of Warcraft es uno de los MMORPG más populares de todo el mundo, a pesar de que lleve casi dos décadas a sus espaldas. Lanzado en 2004, el juego base fue considerado imparable en aquellos años, siendo superior a prácticamente todos los MMO del mercado. Con los años, esto no ha cambiado demasiado, pues la mayoría de juegos MMO acaban muriendo tras unos meses o años, mientras que WoW dispone de cifras de usuarios muy altas aunque el tiempo pase. Esto es, en parte, gracias a que se han lanzado múltiples expansiones que han hecho que nuevos jugadores lleguen y los veteranos de la saga vuelvan. La última de ellas es World of Warcraft: Dragonflight, la cual estará disponible el próximo 28 de noviembre de 2022 y de la cual Blizzard ya ha anunciado los requisitos mínimos y recomendados.

WoW: Dragonflight, requisitos mínimos y recomendados para PC y Mac

Con World of Warcraft: Dragonflight tendremos numerosas novedades, pues traerá una nueva raza y clase jugables, la posibilidad de montar en dragones, nuevos talentos, zonas y mazmorras. El límite de nivel con Dragonflight será hasta el 70 y tendremos un nuevo continente a explorar, denominado las Islas Dragón. Además, Blizzard aseguró que esta expansión traería una nueva interfaz, pero no se han mencionado mejoras gráficas (al menos de forma oficial) o comparativas de gráficos que justifiquen los nuevos requisitos. Y es que, hablamos de unos requerimientos que en ocasiones, son de hasta el doble en comparación a lo que pide Shadowlands actualmente.

Así pues, en PC pide como requisitos mínimos un procesador de 4 núcleos Intel Haswell o AMD Ryzen, mientras que de gráfica necesitaremos una con DirectX 12 y un mínimo de 3 GB. Aquí pide una NVIDIA Geforce GTX 900, una AMD con arquitectura GCN o una Intel Iris Xe integrada. Respecto a la RAM necesitaremos un mínimo de 8 GB y se pide igualmente un SSD de 128 GB. Pasando ahora a los requisitos recomendados, vemos un incremento muy notorio en muchos aspectos. Por ejemplo, en cuanto a CPU pedirá 6 núcleos a 3,5 GHz partiendo de un Intel Core 8 Coffee Lake o un AMD Ryzen Zen 2.

En cuanto a gráfica ya vemos un despropósito, pues requiere una GPU DirectX 12 con 8 GB como una NVIDIA RTX, una AMD RDNA 2 o una Intel Arc 7. La RAM también da un salto hasta los 16 GB recomendados, junto al SSD de 128 GB que ya pedía anteriormente. Lo curioso es que en cuanto a Mac vemos una subida de requisitos igualmente, pero se mantiene el Apple M1 en mínimos y el Apple M1 Max en recomendados, algo que ya exigía Shadowlands.

World of Warcraft: Shadowlands tenía requisitos bastantes más bajos

Si lo comparamos con los requisitos de World of Warcraft: Shadowlands, vemos que estos era bastante más asequibles. Comenzando con los mínimos, Shadowlands pedía un Intel i5-3450 o un AMD FX-8300 muy antiguo. Respecto a la GPU, solo necesitábamos una NVIDIA GTX 760, una AMD RX 560 de 2 GB o una Intel UHD 630 de muy baja potencia. Si pasábamos a la cantidad de RAM recomendada, era de solo 4 GB, aunque se pedía 8 GB para iGPU. También vemos cambios en el almacenamiento, pues podíamos optar por un HDD o un SSD de 100 GB.

Respecto a los recomendados, tenemos una CPU que consta de un Intel i7-6700K de 4 cores o un AMD Ryzen 7 2700X de 8 cores. La gráfica vuelve a dar un subidón pasándose a la gama alta, pues pedía una GTX 1080 o una AMD RX Vega 64 de 8 GB. Eso sí, de RAM necesitaba 8 GB, lo mismo que los mínimos de Dragonflight y lo mismo pasa, recomendando un SSD de 100 GB.