Aumenta un 2000% los fallos en los chips que China envía a Rusia
La alianza de China y Rusia podría comenzar a resquebrajarse, y es que un nuevo informe de un periódico ruso pone el dedo en la llaga entre estos dos países, condenados a entenderse por obligación. Según se informa, la proporción de chips y componentes defectuosos llegados a empresas rusas desde China ha crecido exponencialmente desde el inicio de la guerra en febrero. En concreto, los chips que envía China a Rusia con fallos han pasado del 2% al 40%, lo cual es inaceptable y están perjudicando a la industria rusa.
Rusia está sintiendo lo que es tener a un socio como China emparejado por obligación, donde al mismo tiempo te considera enemigo y posible amenaza cercana. Moscú tampoco lo pone fácil desde luego, pero lo que es seguro es que occidente es un socio más fiable en cuanto a tecnología y pagos. Por ello, depender tecnológicamente de China ya se está viendo que le está costando muy caro a Rusia.
Los chips de China a Rusia tienen muchos más fallos
Curiosamente, fue empezar la guerra con Ucrania y comenzar a Rusia a recibir unos chips cada vez en peor estado electrónicamente hablando. Si ya la tasa de fallos de los chips enviados desde China a Rusia era mala en su momento, con algo menos del 2% de errores (inaceptable para según que componentes se tengan que montar), ahora ese número asciende al 40% aproximadamente.
Es decir, la tasa de fallos se ha aumentado en un 2000% y esto deja en evidencia al gobierno de Xi Jinping y al de Vladimir Putin, puesto que con esa tasa de fallos comentada los suministros están cerca de no ser óptimos para crear los productos finales. Pero, ¿cuál es la razón para que esto ocurra si entre China y Rusia no hay ningún problema y se han declarado "una amistad sin límites"?
Pero realmente es una amistad velada, tienen que apoyarse igual que Europa y EE.UU. lo están haciendo, el mundo se fragmenta en dos grandes bloques donde a China le van quedando cada vez menos amigos en el tablero...
Las sanciones económicas y bloqueos comerciales están haciendo efecto
El rublo no para de subir y esto, lejos de ser una alegría para el gobierno de Putin, económicamente es un desastre en el momento y con la libertad con la que se puede mover Rusia. Comparativamente hablando, EE.UU. sufre algo similar y no tiene ningún problema logístico o mediante sanciones, y el dólar no para de subir para preocupación de la FED.
Pues bien, este hecho del rublo unido a que la cooperación de los distribuidores extranjeros ha terminado en Rusia ha hecho que los canales de importación se tengan que hacer con proveedores no oficiales con China y ahí está todo el problema.
Los fabricantes están obligados por la fuerza a comprar en el mercado negro y ahí la calidad o la veracidad de lo que estás comprando desde China no puede ser verificada en la gran mayoría de casos. No pueden ir a las autoridades a exigir nada porque están haciendo algo ilegal, mientras que el gobierno de Putin mira para otro lado y afirma no haber recibido ningún informe sobre todos estos hechos, un "todo va bien" de manual que esconde una debilidad que llega hasta las altas esferas.
Y es que sin chips, la ofensiva rusa contra Ucrania no debería poder aguantar demasiado, porque los semiconductores y chips que China está enviando a Rusia son clave para el armamento, pese a tener fallos. El problema es que pasar del 2% al 40% no es una tasa asumible para ello. Eso por no hablar de la infraestructura empresarial y de comercio que necesita estos chips para simplemente mantenerse funcionando. ¿Cuánto tiempo aguantará Rusia con esta situación? ¿Cuánto aguantará Europa con el gas por las nubes y la electricidad a precio de oro? Guerra de desgaste con los chips de fondo que hoy nos deja un nuevo capítulo.