AMD no quiere utilizar las fundiciones de Intel, pero estaría obligada a ello

No es la primera vez que se escuchan tambores a lo lejos pregonando que Intel podría fabricar los futuros chips de los principales protagonistas de la industria, y es que el panorama actual nos sitúa a TSMC como la mejor fundición actualmente disponible para las marcas, aunque hay un principal problema, y es que no puede abastecer a todos sus clientes a la vez, y un claro ejemplo de ello es que Apple e Intel tendrán acceso prioritario a los 2nm y 3nm, mientras que en procesos más actuales a estas marcas se le suman MediaTek, Nvidia o la propia AMD por partida triple, si sumamos que de ella depende el suministro de chips de Sony y Microsoft para sus consolas.

Parece que todo indica que en un futuro cercano el principal rival de TSMC será la propia Intel, la cual tiene una estrategia perfecta: por ahora recurre a los silicios de vanguardia de la competencia para uso propio mientras que sus fundiciones se ponen al día, y mientras lo hacen, se fabrican sus propios productos además de empezar a operar como una fundición de terceros para producir chips a otras compañías para generar ingresos, y según los últimos rumores, que la propia Intel haya entrado con fuerza a TSMC como uno de sus principales clientes forzaría a AMD a recurrir a Intel para la fabricación de algunos de sus futuros productos.

Sin ir más lejos, hace poco también se rumoreó que Nvidia podría recurrir a Intel como futuro socio para la producción de chips. En esencia los mejores chips (TSMC) irían a parar a sus productos más rentables, los de alta gama, mientras que Nvidia podría producir productos más asequibles, como pueden ser gráficas de gama media/baja tanto para el mercado gaming como profesional con las obleas de Intel, que es la propia idea que ha instaurado Intel con las obleas de TSMC, por no hablar que Nvidia tendría ya una plaza fija como cliente cuando Intel sea capaz de competir con TSMC en los procesos de fabricación más avanzados del mercado, lo que es una ventaja competitiva a largo plazo.

vía: PCG