Forspoken será el primer juego de PC en aprovechar el SSD con la API DirectStorage
Forspoken se convertirá en el primer juego de PC que aproveche la ya casi olvidada API Microsoft DirectStorage (anteriormente conocida como Xbox Velocity Architecture), y es que hay que recordar que es la tecnología rival del "SSD mágico" de PlayStation 5 que la compañía diseñó tanto para las consolas Xbox Series X|S como para PC.
Si quieres un breve resumen, todo se traduce en realmente aprovechar los SSDs para realizar cosas ya tan normales como eliminar los tiempos de carga. Además de dicha tecnología, el juego también tendrá acceso a todas las ventajas ligadas a las tecnología AMD FidelityFX.
En esencia, esta API se diseñó originalmente pensando en las consolas de nueva generación (es por eso que son las únicas en aprovecharla), y su utilidad es la de reducir la utilización de la CPU cuando se trata de solicitudes NVMe relacionadas con los juegos, ahorrando así los costosos ciclos de CPU para otras tareas. En lugar de gestionar multitud de peticiones NVMe individuales para cada activo que necesita una GPU, la API envía grandes lotes comprimidos de peticiones de I/O en paralelo que son descomprimidos por una GPU compatible con la API DirectX 12, lo que se resume en una poca intervención del sistema operativo y una baja utilización de la CPU, por lo que libera recursos para tareas más importantes, como ejecutar el propio juego.
Al utilizar DirectStorage en lugar de los métodos tradicionales de enviar los activos, como las texturas, primero a la CPU y luego a la GPU, los desarrolladores de juegos no solo pueden reducir los tiempos de carga, sino también mejorar la calidad gráfica y utilizar los ciclos de la CPU sobrantes para añadir una física más avanzada o lidiar con la Inteligencia Artificial del juego. DirectStorage pretende solucionar un problema que existe a día de hoy en PC, que es ver a un Intel Alder Lake con hasta 16 núcleos ofreciendo altos tiempos de carga con un SSD NVMe frente a una consola menos potente.
El único requisito será una GPU compatible con la API DirectX 12 y un SSD NVMe PCIe 3.0 o 4.0, recordando que si bien Microsoft quiso que esta tecnología fuera exclusiva de Windows 11, finalmente también llegará a Windows 10 debido a la poca popularidad de su nuevo OS.
vía: Tom's Hardware