Review: T-Force Delta MAX (SSD SATA III con iluminación ARGB)

El mercado de productos informáticos cambia constantemente y en especial el de componentes dedicados al almacenamiento. Hacía más de 2 años que no traíamos el análisis de un disco SSD 2.5" con interfaz SATA III @ 6.0 Gbps, pero claro, ya que volvemos a traer una review de este tipo de unidades, al menos que sea el T-Force Delta MAX, el cual cuenta con iluminación LED RGB para ser totalmente visible en cualquier situación.

¿Por qué resulta tan llamativo este SSD? Vamos a comprobarlo comenzando con sus características técnicas:

T-Force Delta MAX
Capacidades	250 GB / 500 GB / 1TB
Formato / Interfaz	SSD 100 x 69,85 x 9,5 mm SATA  3.0
Memorias	TLC 3D
Lectura Secuencial	560 MB/s
Escritura Secuencial	250 GB: 500 MB/s 500 GB / 1 TB: 510 MB/s
Lectura Aleatoria	90K IOPS Max
Escritura Aleatoria	250 GB: 75K IOPS Max 500 GB / 1 TB: 80K IOPS Max
Peso	78 gramos
Durabilidad	1M horas hasta presentar un fallo crítico 250 GB > 60TB 500 GB > 120TB 1 TB > 240TB 3 años de garantía limitada
Precio	Apróx. 140€

Antes de comenzar la review, queremos agradecer a TeamGroup su confianza en El Chapuzas Informático al cedernos este producto para su análisis.

Embalaje y accesorios

El T-Force Delta Max nos llega en una pequeña caja con mucho colorido. En la parte delantera, como es habitual en la marca y en otros productos, tenemos una imagen en alta resolución que nos muestra el disco en todo su esplendor.

Junto al logo de la marca, tenemos el nombre del modelo, la capacidad (1 TB en este caso), el color (White Edition) y, para recalcar que cuenta con iluminación ARGB, nos indica que cuenta con un cabezal USB de 5V para la placa base con compatibilidad completa con todos los sistemas de iluminación conocidos (RGB Fusion, Aura Sync, Razer Chroma, MSI Mystic light..)

Será en la parte de atrás donde tenemos las principales características en un perfecto inglés.
- Color traslúcido Blanco Aurora
- La zona traslúcida más larga para cambiar a tu voluntad.
- Optimización inteligente
- Primera interfaz de control dual del mundo.
- Soporta múltiples sistemas de control de iluminación.

Junto a las características, tenemos una imagen que nos muestra los dos tipos de conexión, mediante conector de 9 pines USB o cabecera de 3 pines ARGB.

Cuando quitamos el precinto observamos que, debajo de la cajita inicial, tenemos otra que nos muestra el típico packaging de la serie Delta Max de T-Force, sabiendo que claramente han preferido reutilizar cajas del color negro para abaratar costes en lugar de producir cajas nuevas esperando que ello no repercuta en el consumidor final.

Tras abrir la caja, nos encontramos con el T-Force Delta Max  protegido por un plástico transparente para que la parte superior no se arañe durante el transporte; un bonito detalle, ya que esa parte es la que luego se encarga de mostrarnos la iluminación.

Como accesorios incluidos en la caja tenemos:
- Un pequeño manual de usuario.
- Un sticker de la marca.
- Una gamuza de microfibra.
- 1 cable de conexión micro-USB a 9pin USB.
- 1 cable de conexión micro-USB a 3pines ARGB.

T-Force Delta Max White

Tras sacar el T-Force Delta Max White y tenerlo en nuestras manos comprobamos que se trata de un SSD tradicional de 100 x 69,85 x 9,5 mm comprobando que ese aumento en el grosor es debido a la incorporación de la matriz de iluminación que le añade unos mm de más. De hecho, no es solo el grosor lo que aumenta, sino también su peso hasta los 78 gramos.

Hace uso de una conexión SATA III asegurándonos unas velocidades máximas teóricas de 600 MB/s de lectura/escritura, cuyo valor más realista sugerido por el fabricante es de hasta 560/510 MB/s  de lectura/escritura secuencial y 90.000/80.000 IOPS de lectura/escritura aleatoria. Junto al puerto de alimentación PCIe nos encontramos con un conector micro-USB para la gestión de la iluminación.

Internamente, el T-Force Delta Max White monta una controladora Silicon Motion SM2258 y junto a unas memorias Samsung 64L de tipo TLC. Realmente, llama mucho la atención la combinación, ya que es muy curioso ver esta NAND de Samsung fuera de sus discos, denotando que ya a Samsung poco le importa este mercado.

Pruebas

Conectamos el T-Force Delta Max a nuestro equipo de pruebas y nada más hacerlo su iluminación es la encargada de hacernos ver que estamos ante un disco SDD preparado para ser mostrado en nuestro equipo.

Empezando con las pruebas, de lo primero que nos damos cuenta es que el disco no cuenta con un sensor de temperatura interno, curioso ya que la mayoría de SSDs lo llevan, pero nada preocupante, ya que la temperatura máxima que suelen alcanzar no es para nada preocupante.

El T-Force Delta Max White es un disco bastante eficiente gracias al uso de la V-NAND de Samsung durante su uso normal aunque su consumo en idle es superior al de la mayoría de discos SSDs debido a su iluminación.

Como podemos ver, gracias a la herramienta de medición CrystalDiskMark 8.0.4, su velocidad de lectura secuencial es de 562,34 MB/s y su escritura de 507,83 MB/s, llegando a lo que es a casi el tope de lo que pueden ofrecer los dispositivos SATA III. Se observa también que con el cambio de controladora su velocidad de escritura se ha vuelto mucho más consistente con respecto al T-Force Delta Max en negro (que es la primera versión de este SSD)

De la misma manera, gracias al ATTO disk benchmark confirmamos los valores habituales para estos discos de 535MB/s - 486MB/s y de 87K IOPS - 78K IOPS.

Comparativa de rendimiento

Iluminación

Una de las características más atractivas del T-Force Delta Max es la incorporación de un módulo de iluminación en la parte superior que incrementa su tamaño en unos 2 mm, pero que a cambio cuenta con toda una banda ARGB que podremos conectar y sincronizar con nuestra placa base y resto de dispositivos de iluminación gracias a su conexión de 3 pines ARGB o USB. El efecto, es realmente bonito y lo podéis ver aquí:

 

Por supuesto, no cuenta con ningún software de gestión, ni monitorización, algo que tenemos que tener en cuenta.

Conclusiones

TeamGroup nos trae una revisión corregida de su anterior T-Force Delta Max en versión blanca que hará las delicias de todos aquellos amantes de los setups de dicho color que encima buscaban algo vistoso, ya que cuenta con iluminación ARGB.

El T-Force Delta Max no es el SSD más rápido que vamos a encontrarnos, ya que sus velocidades de 562/508 MB/s lo sitúan en la media-alta de lo que la interfaz SATA III es capaz de ofrecernos. Ahora bien, si tenemos en cuenta para el público que va destinado, que es precisamente aquel que busca lucir al máximo su equipo, no está nada mal.

Hay cosas que se perdonan, como la desaparición del sensor de temperatura y la no utilización de software propietario de iluminación así como de gestión del disco, ya que en realidad, entre que la temperatura que alcanzan los SSDS apenas es elevada, y que dejamos que la encargada de la iluminación sea la placa basa o la controla dedicada, no es que sea precisamente algo necesario, pues es tener más software molestando en segundo plano.

Actualmente su precio ronda los 133 euros en tiendas para el modelo aquí analizado (1 TB de capacidad), un precio quizás un poco elevado, pero de esperar, y es que tiene iluminación ARGB, claro.

Principales ventajas
+	Decente velocidad de lectura/escritura secuencial.
+	Decente velocidad de lectura/escritura aleatoria.
+	Iluminación ARGB muy vistosa.
+	Controladora Silicon Motion SM2258 y memorias Samsung 64L de tipo TLC.
+	Muy buena vida útil.

Aspectos Negativos
-	Consumo eléctrico en idle superior a la media.

Otros Aspectos
*	Grosor ligeramente superior al de un SSD tradicional debido al módulo de iluminación.
*	Sin sensor de temperatura.
*	Sin software de gestión o control de iluminación propietario.

Desde El Chapuzas Informático le otorgamos el Galardón de Oro al SSD T-Force Delta Max (White)