Review: Razer KIYO Pro
Con nosotros tenemos hoy la nueva webcam de Razer, la Razer KIYO Pro, una modelo que viene a mejorar su anterior Razer KIYO que fue lanzada al mercado hace ya 4 años. En la Razer KIYO Pro se apuesta por un sensor Sony IMX327 con tecnología STARVIS; sensor y tecnología que son utilizadas en cámaras de videovigilancia gracias a su alta sensibilidad a la luz.
Veamos para empezar sus especificaciones técnicas:
Razer KIYO Pro | |
Sensor | Sony IMX327 con STARVIS Lente f/2.0 Píxeles de 2,9 micras Sensor de 1/2,8 pulgadas Gorilla Glass 3 |
Resolución | 1920 x 1080 @ 60 FPS // 1920 x 1080 @ 30 FPS con HDR |
FoV | 103º (D), 90º (H), 80º (V) |
Micrófono | Omnidireccional Estéreo 16 bit 48 KHz Sensibilidad: -38 dB |
Conexión | USB 3.0 - USB tipo C |
Compatibilidad |
Windows, Mac y Chrome OS |
Software | Razer Synapse |
Antes de comenzar la review, queremos dar las gracias a Razer por cedernos la Razer KIYO Pro para su análisis.
Índice de contenidos
Embalaje y Accesorios
La Razer KIYO Pro nos llega en un rígido y resistente embalaje de cartón en los que predominan los colores negro y verde de la marca.
En la parte delantera de la caja, encontramos una imagen en alta resolución de la webcam acompañada por el eterno logo de la serpiente tricéfala de Razer junto al sello de "Streamer Certified". En letra pequeña y en la parte inferior tenemos algunas características.
Será en la parte de atrás donde nos encontremos con información más útil y completa (así como repetir aquellas que están en la parte frontal) junto a otra imagen en alta resolución de la webcam:
- Sensor adaptativo a la luz de alto rendimiento para una superior imagen en cualquier condición de iluminación.
- Vídeo sin compresión 1080p 60fps para una absoluta fidelidad de imagen.
- Posibilidad de activar el HDR para tener colores más vibrantes a 30fps.
- Conectividad a velocidad del rayo USB 3.0 par a soportar calidad de vídeo sin compresión.
- Lente con ángulo de visión ajustable para controlar cuanto quieres capturar para tu audiencia.
- Opciones de montaje flexibles para el emplazamiento ideal de la webcam.
Las mismas características que están impresas en la parte de atrás se encuentran en uno de los laterales de una forma más visual.
En su interior, y nada más abrir la caja, tenemos el bundle de Razer compuesto por su manual de instrucciones, una tarjeta de agradecimiento y dos pegatinas con el logo de la serpiente tricéfala.
Bajo el bundle, y protegida perfectamente en un marco de espuma, tenemos la webcam en sí. Nada más verla, sabremos que es bastante aparatosa.
Bajo el maco de espuma que protege la cámara tenemos un cajoncito que guarda el cable de conexión. Este es trenzado, de 1.5m de longitud y USB-A a USB-C, por supuesto con conectores verdes personalizados al puro estilo Razer, incluso con el nombre de la marca.
Junto al cable de conexión tenemos también una tapa que podremos poner a la webcam para cubrir el objetivo y así asegurarnos algo de privacidad. ¿Os recuerda una vez más a un objetivo réflex? Porque a nosotros, sí.
Razer KIYO Pro
La Razer KIYO Pro es una webcam bastante grande que tiende a recordarnos mucho a un objetivo de cámara réflex. Solo la cámara pesa 114 gamos, peso que se incrementa a los 242 gramos con su pinza de sujección-colocación. Sus medidas son de 700Ø x 470 mm y las de su base 700 x 480 x 150 mm.
En el frontal, perfectamente circular, nos encontramos con el objetivo que oculta el sensor Sony IMX327 con tecnología STARVIS junto con un pequeño led en la parte superior que se iluminará para indicarnos que la webcam está conectada.
Los sensores basados en la tecnología STARVIS tienen píxeles retroiluminados que consiguen capturar luz en condiciones poco propicias, algo a lo que debemos sumar la apertura f/2.0 de la lente, los píxeles de 2,9 micrómetros y el tamaño del sensor de 1/2,8 pulgadas.
La Razer KIYO Pro tiene una resolución máxima de 1.080p a 60fps que se reduce a 30fps si activamos el HDR. Esta resolución tiene bastante sentido, ya que es una calidad bastante equilibrada que permite al ordenador grabar la imagen y emitirla sin perjudicar en el rendimiento siendo ya bastante utilizada por los streamers.
El sistema de soporte de la webcam permite colocarla con facilidad tanto en un monitor o portátil como sobre la mesa, así como en un trípode gracias a su rosca inferior de 1/4", como ya hemos podido ver en otras webcams. Por supuesto, podremos incluso quitarle el soporte para ponerla directamente en un trípode si así lo necesitamos.
Software y pruebas
Nada más conectar la Razer KIYO Pro a nuestro ordenador saltará una ventana invitándonos a instalar el Razer Synapse 3 mientras Windows 10 se encarga automáticamente de instalar sus controladores.
La utilización del software no es necesaria para todos aquellos streamers que utilizan el OBS o xSplit ya que desde el mismo software de grabación podemos hacer todos los ajustes necesarios sin tener que tener el de Razer.
El Razer Synapse 3 nos va a permitir controlar los aspectos básicos de la webcam como es el brillo, contraste, saturación y equilibrio de blancos.
El modo predeterminado funciona realmente bien, por lo que no vamos a tener que hacer ningún ajuste más, aunque si queremos podemos seleccionar entre los distintos perfiles que incorpora (suave, vibrante y cálido) para adaptarlo a nuestro gusto, o jugar ya con los parámetros.
En configuración avanzada podremos a su vez, ajustar el zoom, el campo de visión así como otros ajustes para adaptarla perfectamente a nuestras necesidades.
Probando la cámara en diferentes escenarios de luz: a contraluz, con luz frontal, con luz lateral, a oscuras con la luz del monitor y completamente a oscuras se comporta realmente bien aunque en algunas ocasiones hemos tenido problemas con el autoenfoque, ya que daba la sensación que necesitaba "autoajustarse".
En lo que respecta al audio, el micro integrado de la Razer KIYO Pro es de tipo omnidireccional estéreo, con 16 bit a 48 KHz y una sensibilidad de -38 dB. El sonido de nuestra voz es, sencillamente, sobresaliente aunque tenemos que hacer algunos ajustes para que lo capte bien. Tiene rotundidad, está bien representado y no se satura. Razer, en ese sentido, ha hecho un gran trabajo.
Conclusión
En general la Razer KIYO Pro es una opción premium para streamers que buscan elevar su calidad de vídeo al siguiente nivel. Capaz de grabar a 1080p a 60fps estables o 30fps con HDR activado cumple perfectamente con su cometido.
Su sólida construcción, compatibilidad completa con OBS o incluso con Razer Synapse la convierten en una gran opción para quienes necesitan una webcam sin complicaciones, aunque si utilizamos el software que viene por defecto en Windows 10 (Cámara) tendremos problemas porque notaremos una enorme pérdida de calidad.
Mejora a la Razer KIYO original en su sensor, perdiendo con ello la iluminación ¿Lo peor?, su precio, y es que ronda aproximadamente los 200 euros.
Es, sin lugar a dudas, una opción sibarita para aquellos que desean meterse en el mundo del streaming, que tienen conocimientos básicos de vídeo o para aquellos teletrabajadores que buscan una cámara sin complicaciones para sus reuniones por Teams o Skype.
Principales ventajas | |
+ | Sólida construcción |
+ | Buena calidad de captura, incluso a oscuras |
+ | Capacidad HDR (reduciendo los FPS a 30) |
+ | Posibilidad de cambiar entre 3 campos de vista |
Aspectos Negativos | |
- | Precio muy elevado |
- | Requiere configurarla bien para sacarle su máximo potencial |
Otros Aspectos | |
* | Compatible con todas las aplicaciones de video |
Desde El Chapuzas Informático le otorgamos el Galardón de Bronce a la Razer KIYO Pro