La fiscalía de Taiwán acusa a Bitmain (minería china) de robar ilegalmente ingenieros de TSMC y MediaTek
La fiscalía de Taiwán acusó a Bitmain, una empresa con sede en Pekín conocida por producir hardware para la minería de criptomonedas (los famosos ASIC Antminer para Bitcoin), de crear empresas de fachada en Taiwán contraviniendo a la legislación local para contratar a ingenieros de semiconductores con lucrativos paquetes de sueldos para desarrollar tecnología de IA para su exportación a China.
"Descubrimos que Bitmain ha estado robando talentos taiwaneses de investigación y desarrollo para acelerar sus esfuerzos en la capacidad de crear chips de Inteligencia Artificial mediante la creación ilegal de empresas en Taiwán", dijo una portavoz de la Oficina de Fiscales de Nuevo Taipei al medio de comunicación local Nikkei Asia. "Las empresas recién creadas sirvieron para un propósito de caza de talentos y el lapso de tiempo de lo que hizo Bitmain se remonta al año 2018".
Según revela el medio local Apple Daily, Bitmain creó dos empresas de fachada en Taiwán bajo los nombres de IC Link Limited Company y WiseCore para contratar a los mejores ingenieros de la Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC) y MediaTek.
El motivo detrás de ello es que Bitmain quiere expandirse más allá de la volátil industria de las criptomonedas al espacio de la Inteligencia Artificial y al Big Data, y no tener todos los huevos en la misma cesta (desarrollar ASICs para minar Bitcoin).
"Las frecuentes acciones han alertado a nuestras agencias gubernamentales y han revelado que cientos de ingenieros tecnológicos de alto nivel, especialmente maestros de I+D en el diseño de circuitos integrados, han sido cazados furtivamente en tres años, lo que ha provocado no sólo una pérdida masiva de talentos, sino también el riesgo de éxodo de tecnologías básicas clave, lo que ha amenazado el desarrollo de nuestra industria de semiconductores."
Tanto TSMC como MediaTek eran conscientes de que estaban cazando furtivamente a su personal con sueldos muy lucrativos -según los informes, entre 250.000 y 400.000 dólares- y enviaron cartas al personal que se marchaba recordándoles que debían cumplir los acuerdos de no divulgación firmados.
Las dos empresas también sospecharon que estos acuerdos de no divulgación se estaban incumpliendo y se quejaron a la Comisión de Comercio Justo y al Ministerio de Asuntos Económicos de Taiwán, que iniciaron una investigación que posteriormente determinó que estas dos empresas eran tapaderas de una compañía con sede en China.
"Dado que el asunto afecta a la ventaja competitiva de la industria tecnológica de Taiwán, la Fiscalía de la ciudad de Nuevo Taipei, bajo el mando del fiscal Hong Songbiao, ha iniciado hoy una entrevista de búsqueda con la División de Investigación de la ciudad de Nuevo Taipei. La investigación se está llevando a cabo bajo la sospecha de actividades comerciales no autorizadas en virtud de la Ley de Relaciones a través del Estrecho, que se castiga con una pena de hasta un año de prisión, detención o una multa de hasta 150.000 NT$ (4.500 euros)".