China intensifica la compra de equipos de fabricación de chips de segunda mano

Parece que China ha encontrado un plan perfecto para sortear las restricciones de los Estados Unidos a nivel de fabricación de silicios, y la primera pista la soltó Nikkei Asia, y es que reveló que los precios de los equipos de fabricación de chips usados, que no están sujetos a las restricciones impuestas por los Estados Unidos, han aumentado de precio en un 20 por ciento de media, y el motivo no es otro que el aumento de la demanda de compra de los fabricantes de semiconductores chinos.

 0

Nikkei Asia afirmó que "casi el 90 por ciento de las máquinas usadas parecen dirigirse a China", según una fuente de Mitsubishi UFJ Lease & Finance, y que otra fuente anónima de un distribuidor de equipos usados no identificado afirmó que "máquinas que básicamente no valían nada hace varios años se venden ahora por 100 millones de yenes [940.000 dólares]".

Algunos de esos equipos se están utilizando en las líneas de producción, pero Nikkei Asia dijo que algunos de ellos simplemente se están atesorando por si acaso pudieran resultar útiles en el futuro. A las empresas que venden esos equipos no les importa, ya que obtienen importantes beneficios y venden las existencias que, de otro modo, habrían conservado.

Esto no sólo ocurre con las empresas japonesas. Bloomberg informó a principios de este mes que "las empresas chinas compraron casi 32.000 millones de dólares en equipos utilizados para producir chips de ordenadores de Japón, Corea del Sur, Taiwán y otros lugares" en 2020. Eso fue "un aumento del 20% respecto al 2019", y se espera que esta tendencia siga creciendo.

El objetivo final para China es la autosuficiencia. Las empresas del país han avanzado en la fabricación de sus propios equipos de fabricación de chips para no tener que depender de las tecnologías estadounidenses.

 1

China también ha hecho grandes avances desarrollando sus propias CPUs, GPUs, memorias y otros componentes para no tener que depender de los productos occidentales. Pero hasta que no pueda sustituir por completo los equipos de fabricación de chips estadounidenses, suponiendo que Estados Unidos no ceda en sus restricciones, el país va a tener que seguir almacenando estas máquinas que ya están obsoletas, pero que allanarán el camino a esta autosuficiencia futura.

Esto también es un gran negocio para muchas compañías, ya que su maquinaria vale más dinero, lo que les ayuda a reducir costes a la hora de reemplazarlas para acceder a los procesos de fabricación de vanguardia del mercado, por lo que básicamente todo el mundo sale ganando, salvo Estados Unidos, claro.

vía: Tom's Hardware

Artículos relacionados