Review: BenQ Mobiuz EX2710 (IPS

Anunciado el pasado mes de junio, por fin tenemos con nosotros el BenQ Mobiuz EX2710, un monitor de 27 pulgadas que cuenta con un panel IPS y resolución FHD para sacar el máximo partido a su tasa de refresco de 144 Hz sin necesidad de un equipo ultrapotente.

Veamos en primer lugar las especificaciones técnicas que nos ofrece este monitor:

BenQ Mobiuz EX2710
Panel	IPS
Diagonal	27 pulgadas 597,6 x 336,15 mm
Formato	16:9
Resolución	1920 x 1080 píxeles (82 PPP)
Tasa de refresco	144 Hz FreeSync Premium
Tiempo de respuesta	1 ms (MPRT) / 2 ms (GtG)
Contraste	1000:1
Brillo	400 nits
Ángulo de visión	178º / 178º
Colores	8 bits (16,7 millones) HDRi 99% sRGB
Conectividad	2 x HDMI 2.0 1 x DisplayPort 1.2 1 x Jack 3,5 mm para auriculares
Soporte	Inclinación: -5º a +20º Giro: -20º a + 20º Altura: 130 mm VESA 100 x 100
Otros	Altavoces 2 x 2,5W Low Blue Light Flicker Free Brightness Intelligence Plus (B.I.+) Bloqueo Kensington
Consumo	Encendido: 58W Transformador integrado
Dimensiones	539,6 x 614,1 x 216,65 mm
Peso	6,2 kg

Antes de comenzar la review queremos agradecer a BenQ su confianza en nosotros al enviarnos este producto para su análisis.

Índice de contenidos

1 Embalaje y Accesorios
2 BenQ Mobiuz EX2710
3 Pruebas
4 Conclusión

Embalaje y Accesorios

El monitor BenQ Mobiuz EX2710 viene en una caja de cartón que ya nos anticipa su diseño, quedando muy bien protegido en su interior por un marco de corcho que además organiza los accesorios.

Además de la documentación, encontramos la peana dividida en dos partes, así como una tapa para la zona delos conectores, el cable de alimentación y un cable HDMI.

BenQ Mobiuz EX2710

Una vez extraído del embalaje y colocado sobre la peana, nos encontramos ante un monitor que combina un diseño sencillo y elegante en la zona superior con una pena bastante agresiva y con una tira naranja que aumenta la “estética gaming” de la misma. Los biseles son muy reducidos, de 7 mm, aunque como es habitual, engañan apagado y parecen ser menores.

Centrándonos en su panel, contamos con un modelo IPS de 27 pulgadas de diagonal y resolución 1920 x 1080 pixeles (FHD), por lo que ofrece un ratio de imagen de 16:9. Pero los dos aspectos que lo hacen ideal para jugar son su frecuencia de actualización de 144 Hz y su tiempo de respuesta de 1 ms (MPRT) / 2 ms (GtG), siendo compatible tanto con AMD FreeSync Premium para aprovechar hasta el último frame. Completan sus especificaciones un brillo de 400 nits y un contraste típico de 1000:1, valores con los que promete reproducir contenidos HDR gracias a la tecnología HDRi propietaria para mejorar el color, la cual se activa desde un botón en la esquina inferir izquierda.

Bajo la pantalla, tenemos el sensor de iluminación que da pie a la tecnología Brightness Intelligence Plus (B.I.+) la cual permite ajusta de forma inteligente el nivel de brillo para que se adapte a la luz ambiental, algo ideal para los que juegan de noche a oscuras.

Como adelantábamos, la peana tiene un diseño gaming realmente llamativo, realzado por la tira naranja que la decora. Esta nos permite el giro de 20º a cada lado, la inclinación entre -5º y +20º y la regulación en altura en 130 mm, por lo que es ideal para colocarlo a la perfección frente a nosotros.

Quitándola, podríamos usar un soporte VESA 100 estándar, aunque es una pena desperdiciar dicha peana.

El lado posterior mantiene una estética relativamente convencional, aunque con unas aspas que le dan un toque mas agresivo. Es en la esquina inferior izquierda, desde esta vista, donde encontramos los controles del menú OSD, los cuales hacen uso de un joystick para navegar por ellos de la forma más sencilla.

En el apartado de conectividad, disponemos de 2 entradas de video HDMI 2.0 y una DisplayPort 1.2, así como una salida de auriculares jack de 3,5 mm TRS y un conector de alimentación, pues el transformador queda integrado.

Pruebas

Conectamos el BenQ Mobiuz EX2710 a nuestro equipo de pruebas a través del cable DisplayPort 1.2 incluido y compruebo desde el primer momento como combinar una resolución Full HD con una diagonal de 27 pulgadas no es para mí. Acostumbrado a usar un monitor 4K, la diferencia de resolución y por tanto de definición es abismal, algo que se hace muy patente al visualizar textos, sobre todo los de menor tamaño.

Sin embargo, su tasa de refresco de 144 Hz se hace también patente desde el primer momento, dando una fluidez incluso en el escritorio que hace no querer volver jamás a los 60 Hz.

Una gran ventaja de contar con un panel IPS es el visionado en ángulos excelente, pero quizás la mayor sea que ofrece unos colores realmente buenos.

Hemos analizado con nuestro calibrador Spyder5 los colores que nos puede ofrecer, situándose en el 99% del espacio sRGB y alcanzando un 74% del AdobeRGB y DCI-P3. Son valores buenos para la reproducción de contenidos, aunque no suficientes para su uso a nivel profesional en aplicaciones de diseño. Eso sí, viene bastante bien calibrado de fábrica. A continuación, os mostramos una comparativa de los valores alcanzados por los distintos monitores que hemos probado con nuestro calibrador:

Aprovechamos igualmente el calibrador para comprobar el nivel de brillo que ofrece con la medición de 9 zonas de la pantalla. Cierto es que el valor máximo de brillo dista notablemente del prometido en especificaciones, pues de los 400 nits prometidos nos situamos en una media de 267,3 nits y picos de 286 nits en el centro de la pantalla, aunque la menos ofrece una baja desviación entre las distintas zonas y nada de defectos o fugas de luz.

250	268	267
257	286	270
258	275	275

Nos centramos por último en lo más importante, su desempeño en juegos. Es aquí donde sacaremos el máximo partido a su tasa de refresco de 144 Hz y su input lag de 1 ms (MPRT) / 2 ms (GtG). Gracias, o a costa, de que tenemos una resolución Full HD, conseguiremos alcanzar los 144 FPS con mayor facilidad que si hablaremos de 2K, pero es que igualmente gracias a que es compatible con FreeSync Premium, aprovecharemos hasta el último frame generado si no conseguimos alcanzar dicha tasa.

Hay que destacar que el modo HDRi aporta unos colores algo más saturados y con mayor profundidad, pero no hace milagros y mientras no tengamos local-dimming y mayor resolución, difícilmente podremos hablar de un HDR autentico. También destacar que los 2 altavoces de 2,5W integrados son mejores que los de la mayoría de monitores, pero lejos de lo que cualquier pareja de altavoces externos puede ofrecer.

Conclusión

El BenQ Mobiuz EX2710 es uno de los monitores gaming más completos en cuanto a funciones que podemos encontrar, pues ofrece muchos extras muy interesantes. Combinar una resolución FHD y 27 pulgadas puede parecer ridículo para algunos de nuestros lectores, y admito que no deja de resultar chocante en los tiempos que corren, pero ello permite alcanzar con facilidad los 144 Hz con los que disfrutar de la mejor experiencia en juegos, sobre todo shooters o de carreras, que se ven muy influenciados por ello.

A su favor juega ofrecer un panel IPS que aporta buenos colores, no tanto como para usarlo en diseño, pero si para quedar contentos en este sentido. También el que sea compatible con FreeSync Premium para sincronizarlo a la los frames que nuestra grafica pueda generar, en caso de no alcanzar los ansiados 144 FPS.

Otros detalles como la peana altamente configurable o el sistema de luz inteligente son dos aspectos importantes a tener en cuenta, así como la inclusión de una pareja de altavoces de 2,5W que muchas veces no vienen ya en los monitores y pueden salvarnos de un apuro.

Podemos encontrarlo a la venta en tiendas como Amazon o PcComponentes por 299 euros, un precio que es algo elevado, pero debemos tener en cuenta sus extras.

Principales ventajas
+	Excelente desempeño en juegos con sus 144 Hz / 1 ms
+	Compatible con FreeSync Premium para la mejor sincronización de frames
+	Buena representación del color, aunque no suficiente para diseño
+	Biseles muy reducidos
+	Soporte muy regulable; en altura, inclinación y giro
+	Sensor de brillo inteligente
+	2 altavoces de 2,5W integrados