Review: Corsair Carbide 275R (v2)
Con nosotros tenemos hoy la Corsair Carbide 275R que hemos bautizado como v2, ya que es una versión actualizada del modelo original, una semitorre con un diseño minimalista que permite entrever los componentes desde su ventana de cristal templado tintado lateral y que rehuye de estridencias como la iluminación LED, estando disponible tanto en blanca como en negra.
Veamos en primer lugar sus especificaciones técnicas:
Corsair Carbide 275R | |
Formato | Semitorre / ATX |
Dimensiones | 455 x 215 x 460 mm (alto, ancho, profundo) |
Peso | 10,14 kg |
Materiales | Chasis de acero Frontal de plástico Lateral principal de cristal templado tintado |
Bahías | Internas: 2 x 3.5/2.5 pulgadas 4 x 2.5 pulgadas |
Esquema de Refrigeración | Frontal: 3 x 120 mm / 2 x 140 mm (Incluido 1 x
120 mm) * Permite radiador 280/360 mm Trasero: 1 x 120 mm (incluido) * Permite radiador 120 mm Superior: 2 x 120 mm / 1 x 140 mm * Permite radiador 240 mm |
Radiadores compatibles | Frontal: 360/280/240/140/120 mm Superior: 240/120 mm Trasero: 120 mm |
Ranuras expansión | 7+2 slots |
Conectores | 2 x USB 3.0 2 x Jack 3.5 mm (auriculares y micrófono) |
Capacidad | Fuente de alimentación ATX hasta
180 mm Compatible disipadores hasta 170 mm Compatible gráficas hasta 370 mm |
Antes de comenzar la review, queremos dar las gracias a Corsair por cedernos esta caja para su análisis.
Índice de contenidos
Embalaje y Accesorios
La Corsair Carbide 275R viene en una caja de cartón neutro que muestra su diseño en líneas, sus especificaciones técnicas y sus principales características a lo largo y ancho de sus caras, mientras que en el interior queda muy bien protegida por un marco de corcho y por una bolsa de plástico.
Como accesorios, se incluye el manual de usuario, toda la tornillería necesaria para montar cualquier dispositivo, algunas bridas de plástico para organizar el cableado, unas tiras de goma antivibraciones y una llave Allen que realmente no sirve para nada, pero la versión original usaba tornillos Allen para el cristal.
Corsair Carbide 275R
Tras desembalar la Corsair Carbide 275R, nos encontramos ante una semitorre de compactas dimensiones, pues especifica 455 x 215 x 460 mm (alto, ancho, profundo), y cierto peso, pues 10,14 kg no es poco para su cubicaje. Ofrece un diseño muy sobrio y elegante, perfecta para los que quieren escapar de la estética gaming tan de moda, pues ni siquiera cuenta con iluminación.
Su frontal no podría ser más simple, bueno sí, quitando el logo de Corsair de la zona inferior, pero le queda estupendo.
El lado principal está completamente cubierto por un cristal templado tintado que permite entrever el interior del chasis, mientras que el lado opuesto es metálico y completamente opaco. Anotar que ambos permiten la entrada de aire desde una abertura lateral en casi toda la vertical.
El lado posterior nos muestra la posición inferior de la fuente de alimentación, la posibilidad de regular la altura del ventilador de 120 mm y las 7+2 tapas de slots que permiten colocar la GPU en vertical.
El lado superior cuenta con un filtro antipolvo magnético que oculta la rejilla de los ventiladores, quedando en la zona más adelantada una pareja de puertos USB 3.0 junto a los conectores jacks habituales para auriculares y micrófono.
Un último vistazo al lado inferior nos muestra un filtro antipolvo removible para la fuente de alimentación y 4 robustas patas que quedan a su vez apoyadas sobre tiras de goma para evitar la transmisión de vibraciones a la mesa.
Interior
Tras retirar el cristal y la tapa metálica de ambos laterales, podemos acceder al interior de la Corsair Carbide 275R y echarle un vistazo a fondo. Esta nos ofrece espacio para instalar placas base ATX, obviamente también las de menor formato, y sobre ella podemos colocar un disipador de hasta 170 mm de altura y gráficas con hasta 370 mm de longitud, por lo que no estaremos limitados en ninguno de los dos aspectos. A su derecha, quedan dos huecos engomados para el paso de los cables al lado trasero y espacios en los que instalar 2 unidades de 2.5 pulgadas, las cuales quedarán expuestas, pero no su cableado que también pasará rápidamente al lado trasero gracias a un resalte en el metal.
Como es ya habitual en cualquier chasis moderno, la fuente de alimentación queda carenada para ocultarla por completo, así como su cableado, por lo que tendremos un interior mucho más organizado con facilidad. Eso sí, la zona más cercana al frontal tiene un recorte que permite la instalación de los ventiladores y posible radiador.
Es en dicha zona frontal donde tenemos espacio para 3 ventiladores de 120 mm o 2 ventiladores de 140 mm, así como para radiadores de hasta 280/360 mm, viniendo una unidad de 120 mm incluida. Destacar que tambien dispone de un filtro antipolvo removible para su cómoda limpieza, aunque tenemos que retirar para ello la tapa frontal.
El lado superior permite por su parte la instalación de 2 ventiladores de 120 mm en combinación con un radiador de 120/240 mm, o instalar una sola unidad de 140 mm a la derecha.
En la zona posterior encontramos también un ventilador de 120 mm, así como 7 tapas de slots reutilizables y 2 no reutilizables que permiten colocar la gráfica en posición vertical, aunque no se incluye el cable riser como suele pasar en la mayoría de modelos.
Giramos la torre para ver cómo tras la placa base disponemos de poco espacio para organizar el cableado, aunque en la zona izquierda se ensancha algo más y da más posibilidades.
Tras la placa, podemos instalar otras 2 unidades de 2.5 pulgadas, mientras que en la zona inferior disponemos de 2 bandejas para 2 unidades de 3.5/2.5 pulgadas y espacio para una fuente de alimentación de hasta 180 mm de profundidad.
Un último vistazo nos permite ver el cableado que, más allá de los conectores de dos hilos para botones y LEDs, incluye un header USB 3.0 y otro para el audio.
Conclusión
La Corsair Carbide 275R está enfocada a un público que huye de la estética gaming y agresiva tan de moda, pues ofrece un diseño sobrio y elegante como pocos e incluso no cuenta con iluminación. Eso sí, no por ello dejaremos de lado el cristal templado tintado que nos permita entrever las entrañas de nuestro equipo o el carenado de la zona inferior para ocultar fácilmente el cableado, el cual quedará completamente invisible desde el lado principal.
En su interior, podemos instalar una placa base ATX y sobre ella un disipador de hasta 170 mm, así como una refrigeración líquida frontal triple o doble superior, aunque una de 280 mm solo podría ir en el frontal. Además, permite la instalación de gráficas de hasta 370 mm de longitud, pudiendo colocar una en vertical, mientras que para el almacenamiento de datos ofrece numerosas bahías en distintas posiciones del chasis.
Podemos encontrarla a la venta en tiendas como PcComponentes desde 84,99 euros para el color negro aquí analizado, mientras que el modelo blanco asciende a los 89,99 euros, precios atractivos para las prestaciones que ofrece, aunque con mucha competencia en ese rango.
Principales ventajas | |
+ | Diseño sobrio y elegante muy bien rematado |
+ | Lateral principal de cristal templado tintado |
+ | Fuente de alimentación carenada |
+ | Compatible con disipadores de hasta 170 mm |
+ | Permite radiadores de 360/280, 240 y 120 mm |
+ | Muy buena capacidad para unidades de almacenamiento |
+ | Permite instalar la GPU en vertical |
Aspectos Negativos | |
- | Podría permitir un radiador de 280 mm superior |
Otros Aspectos | |
* | Incluye 2 ventiladores de 120 mm |
Desde del El Chapuzas Informático le otorgamos el Galardón de Platino al chasis Corsair Carbide 275R.