Review: CoolPC Battle Royale

En estos días de encierro sin fecha de retorno a las calles, muchos son los que han optado por confinarse jugando durante las máximas horas posibles. Para ellos, equipos como el CoolPC Battle Royale que analizamos hoy son todo un aliado por ofrecer una excelente relación prestaciones/precio y venir ya montado, sin complicaciones. Además, es el primer modelo de esta tienda en formato mini-ITX que probamos, por lo que veremos qué tal se les da el ensamblaje con espacio tan reducido.

Veamos a continuación las especificaciones técnicas del equipo:

CoolPC Battle Royale
Procesador	AMD Ryzen 5 3600 (4,2 GHz) 6 núcleos / 12 hilos
Placa Base	Asus ROG Strix B450-I Gaming
Gráfica	Asus Phoenix GeForce GTX 1660 SUPER OC 6GB GDDR6
Memoria	Crucial Ballistix Sport LT 1x8GB DDR4 2666 MHz
Almacenamiento	SSD Crucial BX500 SATA 960 GB
Sis. Operativo	Windows 10 (Versión Prueba)
Chasis y Refrigeración	Cooler Master MasterCase H100 Disipador AMD Wraith Stealth
Fuente de alimentación	Cooler Master MWE 650W (80+ Bronze)
Otros	Cableado BitFenix Alchemy 2.0 Rojo Ventilador frontal de 200 mm con iluminación RGB
Dimensiones	301 x 216 x 312 mm (alto, ancho, profundo)

Antes de comenzar la review queremos agradecer a Coolmod su confianza al enviarnos este equipo para su análisis. ¡Comencemos!

Índice de contenidos

1 Embalaje y Accesorios
2 CoolPC Battle Royale - Exterior
3 CoolPC Battle Royale - Interior
4 Pruebas
5 Benchmarks y Juegos
6 Conclusión

Embalaje y Accesorios

Coolmod tiene por bandera enviar sus equipos embalados a la perfección y prueba de ellos es que usan una doble caja de cartón con diversas protecciones de por medio para que el equipo llegue impoluto a nuestras manos. En otros casos, envían las cajas de los componentes y accesorios junto a la del chasis, aunque a nosotros no nos las han enviado en esta ocasión.

Como es habitual, el equipo viene en la propia caja del chasis, con sus corchos protectores y una bolsa de plástico como ultimas capas.

Además, encontramos dos pliegos de información adicional sobre el desembalaje, así como un folio pegado en el lateral del chasis recordándonos que debemos sacar una protección adicional de su interior. Cierto es que no queda muy estético, pero si lo ponen, será porque más de uno no se ha dado cuenta y… pasa lo que pasa.

CoolPC Battle Royale - Exterior

Una vez desembalamos y encendemos el CoolPC Battle Royale, nos encontramos ante el chasis cubico compacto y bien rematado, concretamente el Cooler Master MasterCase H100. Se trata de un modelo en formato mini-ATX que destaca por su frontal mallado y por su asa superior, no contando con cristal templado para poder ocultar sus componentes, cosa de agradecer al ofrecer unas dimensiones de 301 x 216 x 312 mm (alto, ancho, profundo) para aglutinar todo.

El lado trasero nos da una primera muestra de cuan fuera de lo convencional está este chasis, pues si bien placa base y tarjeta gráfica quedan en la posición convencional, la fuente de alimentación queda situada sobre el disipador, una posición que pude influir en las temperaturas del equipo.

El lado superior cuenta con una zona mallada para que salga el aire que se introduce desde el frontal, así como con un asa que permite un fácil transporte. Además, ofrece una pareja de puertos USB 3.0 y de jacks para auriculares y micrófono.

Por último, vemos como la base queda apoyada sobre patas de plástico rematadas en tiras de goma para evitar transmitir las vibraciones a la mesa.

CoolPC Battle Royale - Interior

Retirando las tapas laterales, obtenemos acceso al interior del CoolPC Battle Royale, lugar donde nos encontramos la última protección para que el equipo llegue perfecto a nuestra casa. Se trata de una bolsa rellena de espuma que se adapta a la forma del equipo, por lo que la tarjeta gráfica no se moverá lo más mínimo durante el transporte del mismo. Eso sí, en este equipo, debemos retirar la bandeja de los SSDs para poder extraerla.

Tras ello, conseguimos mejor acceso al interior del CoolPC Battle Royale, el cual está realmente bien montado con todo el cableado hecho una piña en el único espacio sobrante, pero sin verse ninguno que no deba estar en ese sitio ni en ninguna otra parte. Siendo un chasis tan compacto, la verdad es que sorprende que este tan bien organizado.

Centrándonos en lo que encontramos en su interior, partimos de una placa base Asus ROG Strix B450-I Gaming para el socket AM4, un modelo de gama de entrada que combina a la perfección con el procesador AMD Ryzen 5 3600 que tenemos instalado. Este cuenta con 6 núcleos y 12 hilos a 4,2 GHz, una gran elección si tenemos en cuenta la relación prestaciones/precio, usando el disipador de referencia de AMD para refrigerarlo, el cual veremos que tal lo hace más adelante. Anotar que solo contamos con un módulo de memoria Crucial Ballistix Sport LT LPX de 8 GB a 2666 MHz, una opción que lo mantiene económico pero que podemos ampliar a 16 GB o a mayor velocidad sin ningún tipo de problemas.

De la potencia para juegos se encarga la gráfica Asus Phoenix GeForce GTX 1660 SUPER OC 6GB GDDR6, un modelo cuyo nombre es más grande que su PCB, pues es compacta y cuenta con un solo ventilador para refrigerarse. Vemos también en la imagen anterior como disponemos de un slot M.2 para un posible SSD NVMe, pero el instalado en este equipo es el Crucial BX500 de 960 GB en formato SATA, el cual ofrece bastante capacidad para casi cualquier usuario, aunque no cumpla con las velocidades de los más exigentes, ni falta que hace.

Anotar también que la fuente de alimentación no es otra que la Cooler Master MWE de 650W, un modelo con certificado de eficiencia energética 80+ Bronze y cableado fijo que cumple con su cometido, sin floritura alguna.

Pruebas

Comenzamos ya nuestra batería de pruebas destacando que el equipo llega con ante el sistema operativo Windows 10 ya instalado, aunque no activado. Podemos adquirirlo con licencia de la versión Home/Pro por 109/156 euros, o adquirir una de las keys que desde El Chapuzas Informático os ofrecemos en oferta cada poco tiempo.

Echamos en primer lugar un vistazo a las capturas de CPU-Z y GPU-Z, los cuales nos confirman el hardware anteriormente detallado.

El test de memorias de Aida64 nos muestra unos resultados en torno a 20 GB/s, esperados por no aprovechar el dual-channel.

También comprobamos con CrystalDisk Mark como el rendimiento del SSD Crucial BX500 es el esperado para un modelo SATA III, el cual es más que suficiente para el uso ofimático, multimedia o para juegos, pues los M.2 NVMe solo se aprovechan realmente en tareas profesionales donde el movimiento de datos es constante.

Un aspecto importante en cualquier equipo son las temperaturas y la sonoridad. El procesador ronda los 70ºC en la prueba de estrés de Aida64, una cifra que nos ha sorprendido gratamente por usar el disipador de stock, algo que ahora entendemos. Por su parte, la GPU alcanza los 80ºC jugando como temperatura máxima, una cifra quizás algo elevada, pero de esperar por lo compacto del chasis. Eso sí, podemos jugar con la curva de su ventilador y que este gire más rápido y vaya más fresca, aunque entonces no tendremos la excelente sonoridad de 41,7 dB para el equipo mientras jugamos.

Anotar que podemos configurar el color de la iluminación del ventilador frontal, así como de la tira RGB que rodea la placa base.

Benchmarks y Juegos

Llega el turno de enfocar las pruebas al rendimiento gaming, por lo que comenzaremos comparando los resultados en los benchmarks más importantes con nuestra habitual plataforma de pruebas compuesta por un i9-9900K, una GTX 1660 SUPER y memorias a 4000 MHz.

Si bien en las pruebas de 3DMark vemos resultados muy desiguales para ambos equipos, en las de Unigine las diferencias no son tan grandes. Es un claro ejemplo de lo que a continuación vemos en juegos, donde la mayor o menor dependencia de la CPU hacen que el rendimiento sea más o menos parejo.

Obviamente, existen diferencias entre ambos equipos, pues la diferencia de precio existe y es mucho mayor.

Conclusión

El CoolPC Battle Royale es una alternativa excepcional para los jugadores que buscan un equipo compacto y transportable, pues con su formato mini-ITX y el asa que ofrece su chasis podremos llevarlo a todas partes.

Ciertamente, la combinación del Ryzen 5 3600 con una GTX 1660 SUPER es más que acertada, así como acompañarlos de un SSD de 960 GB, echando en falta quizás un segundo módulo de memoria para rematar el equipo, aunque siempre podemos añadirlo sin problemas. Su potencia nos permite jugar a prácticamente cualquier título moderno con soltura en calidad Full HD – Ultra, aunque en los más exigentes debemos bajar un poco los filtros para conseguirlo. Además, la placa base ofrece conectividad Wi-Fi 802.11ac, un extra a tener en cuenta para su movilidad.

Podemos adquirir el CoolPC Battle Royale por 899,95 euros con envío gratuito, un precio excepcional si tenemos en cuenta que habitualmente rondaría unos 1000 euros. Cierto es que si optamos por una alternativa ATX o micro-ATX podríamos ahórranos unos 100 euros, pero entonces no sería tan portable ni compacto.

Principales ventajas
+	Realmente compacto y portable
+	Diseño atractivo con ventilador RGB frontal
+	Excelente combinación de Ryzen 5 3600 + GTX 1660 SUPER
+	Muy buen rendimiento para juegos en Full HD - Ultra
+	Muy buena organización del cableado, limpio y organizado
+	Embalaje excepcional