5 formas de jugar que hace 10 años no eran posible

Cada vez más, la tecnología está presente en prácticamente cada cosa que hacemos. Los seres humanos vivimos conectados en todo momento, en un estado online permanente, dependemos de mil aplicaciones de móvil distintas para desempeñar nuestros quehaceres cotidianos y también para exprimir al máximo nuestro tiempo de ocio. Hay quien dice que todos estos avances nos están deshumanizando como sociedad.

Nadie cuestiona que la tecnología tenga su cara oscura, ¿acaso hay algo que no la tenga? Pero, para ser justos, hemos de reconocer que ciertas facetas de la vida son mucho más divertidas gracias a ella. O, al menos, que nos ofrecen muchas más posibilidades que en el pasado. Estamos pensando, por ejemplo, en las posibilidades de juego que hay a nuestro alcance, ya seamos niños o adultos. Son apabullantes y no esperan a nadie, ¡así que más te vale estar al día!

 0

Reconocimiento facial

El escaneo en 3D de rostros permite que puedas crear avatares personalizados en los videojuegos que se parezcan lo máximo posible a ti, pero también reconocen tus gestos y tus movimientos, de modo que puedas accionar los comandos de usuario sin necesidad de pulsar botones, sino movimiento tu cuerpo de un modo más natural e instintivo. Un ejemplo es la tecnología RealSense, de Intel, o la pantalla holográfica con reconocimiento facial y rastreo de ojos ―que te permite jugar en 3D sin la necesidad de usar gafas― presentada por Sony hace unas semanas y compatible con PS4, PS5, Xbox One o Nintendo Switch.

Realidad virtual

La realidad virtual es otra de las posibilidades que apenas llevan unos años entre nosotros. Consiste en un entorno generado mediante tecnología informática que crea en el usuario la sensación de estar inmerso en él. La nueva patente de gafas de realidad virtual de PlayStation podrían incluso funcionar sin cables, enviando y recibiendo datos únicamente de forma inalámbrica Además, dispondrían de dos cámaras frontales y una trasera, más otra cámara adicional incorporada en el mando. Únicamente se trata de una patente, pero lo cierto es que por prometer, promete mucho.

Realidad aumentada

El mundo virtual no es para todos: hay personas a quienes una fantasía tan inmersiva les resulta un poco too much, ya sabes, demasiado abrumadora. Una opción alternativa es la realidad aumentada, que maneja espacios del mundo real añadiendo elementos lúdicos virtuales. El ejemplo más popular de este tipo de propuestas es PokemonGO, desarrollado por Niantic a partir del año 2016 y compatible con dispositivos iOS y Android. Este juego consiste en buscar y capturar pokémon que se hallan escondidos en el mundo real. La tecnología de realidad aumentada puede aplicarse también a otros tipos de ocio como, por ejemplo, echar una partida de squash en tu habitación desde la comodidad de tu cama, ¿no es para volverse loco?

Un casino en tu propia casa

Para ir a los casinos, ya no es necesario ponerse de punta en blanco y desplazarse hasta el más cercano; y tampoco dependes de sus horarios. Los casinos online ponen a tu disposición ―y al alcance de tu mano, porque también puedes acceder desde dispositivos móviles― todo tipo de juegos de azar. Es posible jugar a la ruleta en vivo en casinos o disfrutar de una partida de blackjack con un crupier de carne y hueso que retransmite sus movimientos desde un estudio o un casino real. La experiencia cada vez se asemeja más a la que tendrías en un casino «de toda la vida», dado que también puedes interactuar con tus compañeros de mesa a través de chats en vivo.

 1

Desde donde quieras

Y aquí viene el plato fuerte, porque creemos que uno de los avances más revolucionarios en el mundo de la diversión es que, hoy en día, podemos jugar desde donde queramos. La única limitación es tener batería en el teléfono o en la tableta ―o acceso a una fuente de electricidad― y conexión a la red. Dispositivos como, por ejemplo, el Razer Junglecat, que consiste en dos sticks que se colocan en ambos extremos de nuestro aparato, nos ponen las cosas aún más fáciles, puesto que nos evitan tener que tocar la pantalla, manchándola, para jugar y convierten nuestro smartphone en una consola muy similar a la Nintendo Switch.

Como ves, puede que la tecnología nos haya deshumanizado en ciertos aspectos, pero también nos ha dado alas en otros, como son el campo del ocio o los pasatiempos lúdicos. Este artículo que estás leyendo en estos momentos, que hoy resulta actual, mañana ya estará anticuado, y ahí reside lo estimulante de toda esta vorágine. ¡Que la diversión no pare!