Review: Thermaltake A500 Aluminum Tempered Glass Edition

Vista por primera vez durante la Computex 2019, ya tenemos con nosotros la nueva Thermaltake A500, una torre fabricada en aluminio y cristal templado que hará las delicias de los usuarios que buscan calidad y visibilidad de sus componentes.

Veamos para comenzar sus especificaciones técnicas:

Thermaltake A500
Formato	Semitorre / ATX, micro-ATX, mini-ITX
Dimensiones	560 x 236 x 510 mm (alto, ancho, profundo)
Peso	14,82 kg
Materiales	Chasis acero SPCC y Aluminio Laterales de cristal templado de 4 mm
Bahías	Internas: 6 x 3,5/2.5 pulgadas (bandejas) 1 x 2,5 pulgadas
Esquema de Refrigeración	Frontal: 3 x 120/140 mm (incluidos 2 x 120 mm, 1000 RPM, 22 dBA) Superior: 3 x 120 mm / 2 x 140 mm Trasero: 1 x 120 mm (incluido 120 mm, 1000 RPM, 22 dBA)
Radiadores compatibles	Frontal: 120/140/240/280/360/420 mm Superior: 120/140/240/280/360 mm Trasero: 120 mm
Ranuras expansión	8+2 slots
Conectores	2 x USB 3.0 + 2 x USB 2.0 + USB-C 2 x Jack 3.5 mm (auriculares y micrófono)
Capacidad	Disipador: hasta 160 mm Gráficas: hasta 295 - 420 mm (con/sin deposito) Fuente de alimentación: ATX hasta 220 mm
Otros	Diseño completamente modular

Antes de comenzar la review, queremos dar las gracias a Thermaltake por cedernos esta caja para su análisis.

Índice de contenidos

1 Embalaje y Accesorios
2 Thermaltake A500
3 Interior
4 Conclusión

Embalaje y Accesorios

Embalada en una robusta y pesada caja de cartón, la Thermaltake A500 que muy bien protegida por un grueso marco de poliespan y una bolsa de plástico para que llegue impoluta a nuestras manos.

Además del manual de usuario, encontramos ya en el interior del chasis una caja con el kit de accesorios. Este se compone de 3 pegatinas con el logo de Thermaltake, un pack de gomas para la instalación de unidades de 2,5 pulgadas, la tornillería necesaria para la instalación de todos los componentes, algunas bridas de plástico y el altavoz de sistema.

Thermaltake A500

La Thermaltake A500 que tenemos hoy sobre la mesa es una semitorre de dimensiones ampliadas como denotan sus 560 x 236 x 510 mm (alto, ancho, profundo), aunque más elevado es su peso de 14,82 kg. Este se debe en gran parte al cristal templado, pero también por un chasis de acero SPCC de buen grosor y al aluminio que la rodea.

Tanto el frontal como la tapa superior están completamente cubiertos por aluminio con un diseño minimalista y elegante, lejos de la tónica gaming habitual en la marca. Solo el logo de Thermaltake resalta ligeramente en la zona inferior, dejando espacio para la entrada de aire solo en el margen inferior, pues en los laterales lo tapa el propio cristal como podemos ver en la siguiente imagen.

Ambas tapas laterales son de cristal templado tintado de 4 mm de grosor, contando con bisagras para su apertura y con un tornillo manual que bloquea la apertura a modo de cerradura.

Centrándonos en el lado posterior, vemos como la fuente de alimentación queda en posición inferior, instalándose fácilmente con un adaptador que podemos retirar con 4 tornillos manuales. Sobre ella encontramos las 7 tapas de slots convencionales más 2 adicionales que nos permiten la instalación de la GPU en vertical, aunque no se incluye el adaptador riser, por lo que debemos comprarlo aparte. Por último, en la zona superior podemos instalar un ventilador de 120 mm, que viene incluido, y regularlo en altura.

Tumbamos ahora la torre para comprobar como la tapa superior está cubierta igualmente por el aluminio que tan buen diseño le aporta. Es en la zona más adelantada donde encontramos dos parejas de puertos USB 3.0/2.0, un USB-C 3.1 Gen.1 y la pareja de jacks de audio, así como los botones y LEDs convencionales.

Terminando con el exterior, vemos como la base cuenta con dos patas de aluminio que son rematadas por 4 tiras de goma, una de ellas no muy bien pegada de fábrica. Además, destacar el amplio filtro antipolvo que podemos retirar desde atrás o desde el frontal, siempre que quitemos ante la tapa.

Interior

Como vemos en la imagen anterior, ambos laterales cuentan con una apertura con bisagras de gran calidad que, si bien le dan un aspecto más atractivo, requieren de bastante espacio para manejarnos.

Una vez accedemos al interior de la Thermaltake A500, vemos un diseño bastante convencional dentro de los cánones modernos, aunque con algunos detalles propios. Podemos instalar una placa base ATX, micro-ATX o mini-ITX y sobre ella colocar un disipador de hasta 160 mm de altura, algo justo ya que no permite los 2 o 3 modelos de mayor envergadura del mercado. Como adelantábamos, podemos optar por instalar la GPU en vertical, admitiendo modelos de hasta 420 mm si retiramos los bloques de bahías, así como de hasta 295 mm manteniéndolos.

Como ya es común en la mayoría de modelos, vemos como la fuente de alimentación queda carenada, aunque como aspecto peculiar nos permite ver la marca y modelo de la misma.

En el frontal, disponemos de una pareja de bloques de 2 bahías de 3,5/2,5 pulgadas que se colocan en bandejas extraíbles. Quitándolos podemos colocar hasta 3 ventiladores de 120/140 mm, así como un radiador triple de 360/420 mm, viniendo 2 unidades de 120 mm de fábrica (1000 RPM, 22 dBA).

Igualmente, en el lado superior, podemos montar hasta 3 ventiladores de 120 mm o 2 ventiladores de 140 mm, con los correspondientes radiadores compatibles de hasta 360/280 mm.

En el lado posterior, encontramos instalado un ventilador de 120 mm que destaca por no contar con iluminación, algo extraño en la marca, aunque rompería con la elegancia del conjunto.

Giramos la torre para ver como tras la placa base disponemos de mucho espacio para organizar el cableado, disponiendo además de 2 bandejas que permiten la instalación de 2 unidades de 3,5/2,5 pulgadas y una bandeja adicional para una unidad de 2,5 pulgadas tras la placa base.

Por último, un vistazo al cableado incluido nos permite comprobar cómo, aparte del esperado, disponemos de un conector USB 3.1 Gen.1 adicional para el puerto USB-C, echándose en falta que fuera Gen.2.

Conclusión

La Thermaltake A500 es la nueva apuesta de la marca taiwanesa enfocada al mercado europeo, más elegante y sobrio que el propio. Es por ello que ofrece un diseño minimalista en el que se combina el cristal templado tintado con el aluminio, dejando totalmente de lado la iluminación LED RGB.

Su interior, bastante amplio y capaz, permite la instalación de un radiador triple frontal y otro superior, limitándonos un poco en cuanto a posibles disipadores en 160 mm. Tampoco tenemos problema para instalar cualquier GPU, siempre que no usemos todas las bahías, pudiendo además colocarla en vertical, comprando el cable riser aparte.

Quizás el detalle que menos nos guste es que el puerto USB-C no sea Gen.2, pues perderemos las altas tasas de transferencia que estos pueden ofrecer.

Podemos encontrarla a la venta en tiendas como PcComponentes por 229,99 euros, un precio algo elevado pero que era de esperar por el uso del aluminio en su construcción, así como por el grosor de sus cristales laterales abisagrados y de su chasis.

Principales ventajas
+	Excelente calidad del chasis con aluminio en el exterior
+	Laterales de cristal templado tintado con bisagras para su apertura
+	Diseño elegante, sin estridencias
+	Incluye 3 ventiladores de 120 mm
+	Permite gráficas de hasta 420 mm
+	Buen número de bahías de 3,5/2,5 pulgadas