Sony ya está trabajando con la CPU AMD Ryzen que dará vida a la PlayStation 5

Sin sorpresas de por medio, un programador principal de Sony, asociado al Advanced Technology Group, está trabajando con la tecnología Ryzen de AMD. Su trabajo consiste en mejorar el soporte de la microarquitectura del núcleo Zen dentro de la pila de compiladores LLVM, un componente clave de una herramienta utilizada en el entorno de desarrollo de la PlayStation 4.

Debido a esto, es fácil pensar de que todo este trabajo ligado a un procesador AMD Ryzen esté centrado en la futura consola de Sony, la PlayStation 5, ya que la actual consola emplea unos núcleos Jaguar muy pobres en rendimiento, por lo que el salto a los núcleos Zen supondrán una gigantesca diferencia de rendimiento prácticamente imposible de cuantificar hasta que no tengamos los datos brutos de rendimiento de la consola.

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La evidencia, descubierta por el sitio especializado en Linux, Phoronix, muestra al experimentado programador de Sony haciendo una serie de compromisos con el github LLVM en las últimas semanas, todos ellos relacionados con la arquitectura "znver1", el nombre clave de la primera generación de procesadores AMD Ryzen. Además de eso, la información en LinkedIn confirma la participación del personal en el desarrollo del compilador para el hardware de PlayStation. Los créditos del juego en Tearaway de Media Molecule y DriveClub de Evolution Studios, confirman que el desarrollador también forma parte del Advanced Technology Group de Sony, que desempeña varios roles en la organización de Sony.

Tomado al pie de la letra, el hecho de que el titular de la plataforma está mejorando una parte clave de la cadena de herramientas del desarrollador para una nueva línea de procesadores que ninguno de sus productos admite actualmente, es una evidencia convincente de que Ryzen será un componente clave de una nueva consola. Sin duda, es la opción más lógica para una nueva arquitectura de CPU tanto para Sony como para Microsoft, ya que el trabajo de preproducción en hardware de próxima generación continúa en un segundo plano.

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Lo curioso es que el trabajo de Sony es con la versión de primera generación del núcleo Zen, mientras que una fecha de lanzamiento de 2019/2020 para una nueva consola encajaría con el calendario de la iteración de la segunda generación de la tecnología de AMD. Sin embargo, la elección de las tecnologías disponibles para los fabricantes de consolas se basa en lo que está disponible en un marco de tiempo determinado y en el que los arquitectos del sistema desean dedicar tiempo y esfuerzo en términos de personalizaciones a medida.

Tocará esperar para ver si estaremos ante unos núcleos Zen @ 14nm de primera generación o unos Zen+ @ 12nm de segunda generación que da vida a los procesadores Ryzen 2000 Series, y claro, qué gráfica le acompañará, aunque viendo lo bien que lo han hecho los Intel Kaby Lake-G, con gráficos Radeon Vega integrados, equivalentes a una GeForce GTX 1060 Max-Q, ya nos podemos hacer una idea del potencial que será capaz de alcanzar la PlayStation 5.

vía: Eurogamer

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