Resuelven el misterio de por qué la Torre de Pisa no se cae a pesar de los terremotos

Durante más de medio milenio, la más que famosa Torre de Pisa ha sido uno de los monumentos más importantes e icónicos de toda Italia, y con ello también se ha convertido en el objetivo de millones de turistas que observan con incredulidad su inclinada posición realizando curiosas posturas en perspectiva. No obstante, este edificio también ha sido durante años un gran quebradero de cabeza para muchos ingenieros de todo el mundo, dado que nadie ha conseguido responder a la pregunta de por qué la Torre de Pisa no se ha caído tras haber sufrido grandes terremotos durante varios siglos.

 0

Y es que ahora una investigación liderada por científicos de la Universidad de Bristol, en Reino Unido, ha propuesto una posible explicación a este fenómeno. Después de estudiar datos sísmicos, geotécnicos y estructurales, han concluido que lo que mantiene erguida a la Torre de Pisa es un proceso conocido como interacción dinámica suelo-estructura (DSSI, por sus siglas en inglés). Este proceso describe la relación entre cimientos y suelos cuando se producen movimientos en el terreno.

Tras haber comenzado a inclinarse cuando el propio subsuelo de la torre cedió en el momento de construir la tercera planta de la misma, la Torre de Pisa ha llegado a alcanzar cuatro grados de inclinación, lo que significa que  cuatro metros de la parte superior del monumento están desalineados. La clave de su resistencia a caerse se encuentra, en que la considerable altura y rigidez de la torre, en combinación con la blandura del suelo situado bajo ella, tienen la capacidad de modificar la forma que tiene la Torre de Pisa de responder a las vibraciones. Debido a esto, la torre no entra en resonancia durante los terremotos, lo que significa que su oscilación no coincide con el periodo de las vibraciones, evitando así que finalmente ceda y se derrumbe.

vía: ABC

Artículos relacionados