Review: Intel Core i5-8600K
Intel Core i5-8600K
En esta ocasión, no contamos con el embalaje del procesador, pues es una muestra de ingeniería que nos llega desembalada, por lo que pasamos directamente a centrarnos en ella.
Al igual que su hermano menor, el i5-8400, el nuevo Intel Core i5-8600K cuenta con 6 núcleos que, a diferencia de sus hermanos mayores, los i7, no cuenta con HyperThreading y por lo tanto ofrece 6 hilos. Estos trabajan con una frecuencia base de 3.60 GHz que asciende hasta los 4.30 GHz en modo Turbo, ofreciendo un total de 9 MB de caché L3, así como 6 x 256 KB + 2 x 6 x 32 KB de caché L2 y L1 respectivamente.
Obviamente es un procesador para el socket LGA1151 y por tanto hace uso del sistema de conexión “Land Grip Array”, donde los pines están en la placa base y no en el procesador. Eso si, la “K” en su nomenclatura indica que el multiplicador de frecuencias del procesador está desbloqueado y por tanto podemos realizar overclocking sobre él de esta forma, además de mediante el BCLK.
Añadir que el conjunto de instrucciones soportadas cuenta con MMX, SSE, SSE2, SSE3, SSSE3, SSE4.1, SSE4.2, EM64T, VT-x, AES, AVX, AVX2, FMA3, al igual que las generaciones previas.
Los gráficos integrados se han actualizado a los Intel
UHD Graphics 630, los cuales cuentan con 24
unidades de ejecución a 350 MHz que
pueden ascender hasta los 1,15 GHz de forma
dinámica y utilizar hasta 64 GB de la memoria RAM
del sistema. Permiten la reproducción de contenido
4K en hasta 60 Hz gracias a las
salidas de vídeo HDMI/DisplayPort que ofrezca la placa base sobre
la que montemos el procesador, siendo además compatible con
DirectX 12 y OpenGL 4.5.
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