Review: Aorus GeForce GTX 1080 Ti 11G
Aorus GeForce GTX 1080 Ti 11G
Una vez desembalamos por completo la GTX 1080 Ti 11G, nos encontramos ante el potente disipador WindForce Stack 3X, el cual lleva la tarjeta hasta unas dimensiones de 293 x 142 x 55 mm que la hacen ocupar 3 slots. Este dispone de 3 ventiladores de 100 mm configurados en 2 niveles para que la longitud total pueda ser inferior a los 300 mm. Además, mientras que los externos giran en un sentido, el intermedio lo hace en el opuesto para mejorar el flujo de aire. Ni que decir tiene que es un modelo semipasivo, por lo que en reposo los ventiladores permanecen apagados.
En su lado externo, cuenta con una salida DVI-D con una resolución máxima de 3584 x 1536 @ 60 Hz, 3 salidas DisplayPort y 2 salidas HDMI 2.0b, soportando todas ellas una resolución de 4096 x 2160 pixeles (4K) @ 60 Hz. El marco naranja alrededor de la DVI es un indicativo de que es una salida compartida con un HDMI que veremos luego en el lado opuesto, una posición más cómoda para gafas VR.
Mientras que en un lateral de la tarjeta solo encontramos el conector PCI Express 3.0 x16 para su conexión a la placa base, en el opuesto encontramos dos conectores SLI que permiten su conexión a otra tarjeta (no permite SLI 3-way / 4-way) y dos conectores de alimentación PCI Express de 8 pines, lo que garantiza una entrega de hasta 375W (2 x 150W + 75W slot).
Destacar además que el logo de Aorus cuenta con Iluminación LED RGB Fusion configurable por software en 16.8 millones de colores.
En el lado posterior de la tarjeta encontramos un backplate de aluminio negro en su mayor parte, aunque una porción de cobre queda al descubierto para ayudar a disipar el calor del PCB tras el núcleo. Además, el backplate ayuda a refrigerar el VRM con pads térmicos.
Retiramos el backplate y el disipador de la Aorus GeForce GTX 1080 Ti 11G para posteriormente analizar mejor los componentes sobre su PCB. Este cuenta con 6 heatpipes de cobre que reparten el calor extraído desde una amplia base de cobre hasta dos radiadores de aletas de aluminio que cubren la tarjeta prácticamente por completo. Además, cuenta con thermal pads para las memorias y el VRM, quedándose algunos en el lado opuesto como vemos a continuación.
Basada en el chip Nvidia GP102 y fabricada en 16 nm, la GeForce GTX 1080 Ti cuenta con 3584 CUDA Cores (224 TMUs, 32 ROPs) a una frecuencia de 1582/1480 MHz en el modelo de referencia, pero Aorus la exprime hasta los 1708 / 1594 MHz en el “modo OC”, obteniendo así un overclocking de fábrica de 16/114 MHz (frecuencias turbo boost / base), que ya de por sí está bastante bien, aunque lógicamente podremos exprimirla aún más por nuestra cuenta.
A través de un bus de 352 bits, disponemos de 11 GB de memoria GDDR5X a una frecuencia de 11.010 MHz (11 GHz) que se reparten en 11 módulos con 1 GB de capacidad cada uno fabricados por Micron con una frecuencia real de 1376 MHz.
Otro de los puntos fuentes de la Aorus GeForce GTX 1080
Ti 11G es su potente VRM de 12+2
fases con componentes de la mejor calidad, destacando los
chokes de la mismísima Titan X.
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