Apple incorpora SoCs ARM a sus equipos Mac para reducir el consumo
Hasta ahora sólo eran rumores, pero Bloomberg afirma que Apple se encuentra ya trabajando en una nueva generación de equipos Mac dotados de procesadores con arquitectura ARM. El motivo principal de que la compañía haga uso de esta arquitectura tan popular en los dispositivos móviles se debe a su baja autonomía, por lo que la compañía, en vez de hacer que sus equipos portátiles ganen unos milímetros de espesor para añadir baterías más generosas, buscaba independizarse de Intel, lo que también ayuda a mejorar los márgenes de beneficio.
Estos SoCs ARM consumen muy poco, pero también son muy poco potentes frente a una mayoría aplastante de procesadores x86, y lanzar un portátil a precio de oro que se arrastre con aplicaciones pesadas es algo muy negativo para el usuario y dañino para la propia manzana mordida, es por ello que no lo quedará más remedio que seguir ligada a Intel, y esto se traduce en que los procesadores ARM llegan para reemplazar el trabajo poco exigente que realizan las CPUs de Intel.
En los dispositivos móviles se suelen tener dos clúster, uno de alto rendimiento y otro de bajo consumo, aquí pasará lo mismo: el procesador Intel x86 se encargará de las tareas pesadas, mientras que el SoC ARM hará uso de su función "Power Nap", característica encontrada en MacOS que permite al equipo realizar tareas como la sincronización de correos electrónicos, la sincronización del calendario, y las actualizaciones de software cuando el equipo está en suspensión.
Delegar estas tareas al nuevo chipset ARM proporcionará un mayor ahorro energético y con ello un aumento de su autonomía. Este SoC recibiría el nombre de Apple T310 y será una actualización más inteligente que añadir una TouchBar.