Review: SilverStone CS380
Interior
Tras retirar las tapas laterales, pasamos a ver el interior de la SilverStone CS380, el cual sorprende en gran manera por su diseño retro, pues a día de hoy pocos chasis conservan su interior sin pintar. Quizás a mucha gente le pueda parecer anticuado, pero he de reconocer que tiene su punto.
En su interior tenemos espacio para instalar una placa base ATX, obviamente también las de menor formato, junto a un disipador hasta 146 mm de altura y gráficas con hasta 241 mm de longitud, por lo que estamos limitados a modelos no demasiado grandes, pero no es un chasis para equipos gaming ni grandes sistemas de refrigeración. Destacar los dos ventiladores de 120 mm que refrigerarán las unidades de almacenamiento, aunque queda poco espacio para la entrada de aire a estas.
Un nuevo vistazo al frontal, esta vez sin las bandejas para las bahías, nos permite ver como un amplio PCB incluye los conectores SATA/SAS de alimentación y datos, permitiendo así la extracción en caliente con solo abrir la puerta frontal.
En el interior, dos conectores Molex alimentan el total de 8 unidades máximas, mientras que cada una dispone de un conector SATA y uno SAS, a elección de la necesidad.
De la zona posterior poco nuevo podemos decir, más bien ver el ventilador de 120 mm ya citado. Igualmente, la tapa superior ofrece poco o nada que comentar.
De la zona inferior si debemos comentar los 3 pivotes de goma donde quedarán apoyada la fuente de alimentación, perfectos para evitar las vibraciones.
Giramos la torre para ver cómo tras la placa base disponemos de bastante espacio para organizar el cableado, aunque sorprende aún más encontrar el acero sin pintar, como se ha hecho toda la vida.
Anotar por ultimo que el cableado es el que cabe esperar, con un
header USB 3.0 para los puertos frontales, otro para el audio y
conectores de 2 pines para botones y LEDs.
Seguir leyendo...
