Review: SilverStone CS380
SilverStone CS380
Una vez desembalamos al completo la SilverStone CS380, nos encontramos ante una semitorre con unas dimensiones de 425.6 x 215.3 x 487.5 mm (44.7 litros) no demasiado pesada, pues su chasis de acero no es demasiado grueso.
Su frontal de plástico está formado al completo por una puerta con una tira que hace las veces de espejo, contando solo en el exterior con el botón de encendido. Tras ella, disponemos de 2 bahías de 5.25 pulgadas y 8 bahías para unidades de 3.5/2.5 pulgadas en bandejas extraíbles.
Las llaves que vimos en un principio, nos permiten bloquear la apertura de la puerta, algo importante teniendo en cuenta la facilidad con la que se podrían extraer las unidades de almacenamiento. Además, el botón de encendido se puede bloquear en el exterior para que nadie pueda apagar/encender el equipo sin antes abrir la puerta, que supondríamos bloqueada. De la misma forma, tanto la pareja de puertos USB 3.0 como la de jacks de 3.5 mm para auriculares y micrófono, quedan escondidos tras la puerta.
Ambas tapas laterales son de acero con un biselado que aumenta ligeramente la capacidad interna, disponiendo además de una amplia zona agujereada en la principal para la entrada de aire a los ventiladores que veremos más adelante.
El lado posterior, ofrece la fuente de alimentación en posición inferior, 7 tapas de slots de expansión y el espacio para un ventilador de 120 mm, que viene incluido.
Igualmente, el lado superior es de acero completamente liso y opaco, mientras que el inferior queda sin pintar y ofrece 4 patas de plástico para el apoyo sobre la mesa (sin gomas anti-vibraciones), así como un amplio filtro anti-polvo para la fuente de alimentación.
