El iPhone 7 se somete a la prueba de las caídas

Siguen sometiendo a todo tipo de pruebas al iPhone 7, si ayer veíamos cómo su cámara estaba muy lejos de ofrecer la calidad de una cámara refléx, e incluso quedándose un peldaño por detrás del Galaxy S7, hoy toca comprobar la resistencia de sus materiales y poner a prueba su diseño ante las posibles caídas que tenga, para ello se usa una máquina que tira ambos teléfonos a una altura exacta de 1 metro para ofrecer una comparativa idéntica, máquina profesional que emplean los propios fabricantes para probar la resistencia de sus terminales.

Tanto el iPhone 7 y como el iPhone 6s mostraron signos de desgaste abrasivo menor. Ambos terminales aguantaron bastante bien las caídas de espalda, de lado, y en vertical, saliendo en todos los casos con algunas marcas menores visibles a la luz del día. Pero, como viene siendo ya costumbre, la caída bocabajo generó graves daños a las pantallas de ambos teléfonos, las cuales en ambos casos siguen funcionando. Mientras que el iPhone 6s tuvo que ser tirado 5 veces bocabajo para que la pantalla se quedara inutilizada, el iPhone 7 necesitó sufrir 7 caídas bocabajo para obtener el mismo, aunque claro, sólo nos quedamos con que si se cae una vez bocabajo a un metro de altura ya puedes ir ahorrando para sustituir la pantalla.