La Xbox One S es más potente que la Xbox One
Microsoft se guardaba un as en la manga, y era inevitable pensar lo contrario, la Xbox One S no solo es más pequeña, ligera y eficiente que la Xbox One, sino que la compañía ha aprovechado el uso de un silicio mejorado (menor litografía) para mejorar su rendimiento, concretamente el del procesador gráfico de AMD, el cual ha visto cómo ha pasado de trabajar de 853 MHz a 914 MHz haciendo que su rendimiento pase de los 1.31 a 1.40 TFLOPs, a lo que se le suma un aumento del ancho de banda de la ESRAM en un 7.1 por ciento, lo suficiente para hacer que pase de tener un ancho de banda de 204 a 219 GB/s.
Si sumamos ambas mejoras, la Xbox One S es un 6.1 por ciento más rápida que la Xbox One, aunque dependiendo del juego existe una mejora de hasta un 8.1 por cierto. Los chicos de Digital Foundry han puesto a prueba la nueva consola, y salvo a juegos capados a 30 FPS (donde no hay mejora) en otros juegos podemos ver mejoras llamativas, sobre todo en Project Cars, donde se puede alcanzar una mejora de hasta un 11 por ciento jugando con una cámara en tercera persona, aunque obviamente pese a esta mejora de rendimiento sigue estando varios peldaños por detrás de la PlayStation 4, pero toda mejora es agradecida para aquellos que estén pensando comprarla.