Explota la burbuja GoPro, pérdidas y despidos
Era cuestión de tiempo, si hubo un día en que GoPro innovó en el sector audiovisual con cámaras de tamaño ultracompacto resistentes a todo, el paso del tiempo le ha pasado factura a una compañía que no ha sabido adaptarse a la exigencia del mercado, eso se traduce en ofrecer unos precios razonablemente lógicos si tenemos en cuenta que rápidamente aparecieron fabricantes que ofrecían opciones mucho más atractivas, una de las marcas que más ha conseguido hacerle daño a la compañía fue SJCAM, la cual tiene una gran variedad de cámara deportivas de alta calidad a un precio agresivo.
A este mercado se han sumado muchos fabricantes importantes que van desde la mismísima Xiaomi, a empresas de gran calibre como Sony, o expertas en el campo de la fotografía, todo ello ha hecho que GoPro vendiera menos cámaras de lo esperado, lo que le ha supuesto una reducción de sus ingresos en torno a los 80 millones de dólares durante el último trimestre de 2015, lo que ha conllevado que la compañía despida al 7 por ciento de su cartera de empleados (99 trabajadores).
Para hacernos a la idea, la GoPro Hero 4 Session, una sencilla cámara con un sensor de 8 megapíxeles capaz de grabar a 1080p @ 60 FPS, salió a la venta por poco más de 400 euros, y a día de hoy las ventas son tan bajas que ya su precio ronda la mitad, los 200 euros, lo que demuestra los altos márgenes de beneficio que mueven sus cámaras y que solo han ajustado los precios cuando los números rojos han rondado a la compañía. El gran problema de GoPro es que a día de hoy es muy común encontrar cámaras iguales o mejores que las que ofrece esta compañía a precios muy inferiores, por lo que a la compañía no le queda más remedio que volver a innovar u ofrecer unos precios mucho más terrenales, ya que queda demostrado que la única empresa que vende bien sin bajar los precios es Apple.