Review: Xiaomi Yi
Xiaomi Yi
La Xiaomi Yi llega en una caja de cartón neutro, típica en la marca, con las especificaciones al reveso.
En el interior, encontramos la cámara bien protegida por un marco de cartón y los accesorios en un segundo nivel resumidos a manual de usuario, batería de litio con 1010 mAh y un cable de carga micro-USB.
Muy importante en este caso e manual de usuario, pues aunque están en chino, incluye un código QR con el que podemos descargar directamente la aplicación Yi Camera que nos permite tomar el control de esta.
Una vez desembalamos la Xiaomi Yi nos encontramos ante una muy compacta y ligera cámara, pues no en vano especifica unas dimensiones de 6 x 2.1 x 4.2 cm y un peso de 72 gramos. Eso sí, lo que más llama la atención es su diseño con unos colores de lo más llamativos que bien la hacen parece un juguete infantil antes que una cámara deportiva con aspiraciones de alta calidad. Eso sí, también está disponible en blanco, por lo que problema resuelto para los que no les guste este color.
En su cara frontal, encontramos un botón de encendido, que además sirve para cambiar entre el modo foto y vídeo, que cuenta con un LED en su alrededor. Junto a este, encontramos el objetivo gran angular con 155º de apertura y tras el que se esconde un sensor Sony Exmor R BSI CMOS de 16 megapíxeles que augura una alta calidad en las grabaciones. Además, este se ayuda del procesador Ambarella A7LS para permitir la grabación Full HD (1920 x 1080 píxeles) a 60 imágenes por segundo haciendo uso del codec H.264.
En la cara superior encontramos el micrófono integrado, un LED indicador y el botón obturador.
En el margen izquierdo encontramos un botón para activar la conectividad Wi-Fi y un LED que nos indica el estado de esta. Gracias a dicha conectividad, Xiaomi omite la integración de una pantalla en su cámara y hace uso de la incorporada en nuestro smartphone tanto para el live view como para la visualización de imágenes/videos ya capturados.
De esta forma, en el reverso encontramos dos tapas que dan acceso al compartimento de la batería y a los conectores HDMI/micro-USB y el slot micro-SD. Recalcar que para este último aconsejan usar tarjetas clase 10 cuanto menos, pues el ancho de banda de la grabación puede ser elevado en su máxima calidad.
Por último, en la base encontramos otro LED
indicativo y la rosca para fijarla en
algún tipo de soporte, aunque por desgracia Xiaomi no incorpora
ninguno con su cámara, ni siquiera una carcasa acuática con lo de
moda que está.
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