Review: Creative Sound Blaster Z
Aunque con ya tiempo en el mercado, hoy tenemos entre manos la tarjeta de sonido Creative Sound Blaster Z, un modelo 5.1 enfocada a jugadores que buscan un gran posicionamiento y una excelente calidad en la reproducción de audio.
Veamos las especificaciones de la tarjeta de sonido Creative Sound Blaster Z:
Antes de comenzar la review, queremos dar las gracias a
Creative por enviarnos la
tarjeta de sonido Creative Sound Blaster Z para su
análisis.
Índice de contenidos
Embalaje y Accesorios
La tarjeta de sonido Creative Sound Blaster Z llega en una caja de cartón de pequeñas dimensiones que permite entrever el producto desde una pequeña ventana frontal. A lo largo y ancho de todo su embalaje encontramos detalladas sus características y algunas de sus principales especificaciones técnicas.
En el interior, encontramos la tarjeta de sonido poco protegida junto a algunos accesorios:
Estos se resumen en el manual de usuario, disco de drivers y el micrófono con formación de haces (beamforming) que permite ser situado frente a nosotros para capturar nuestra voz en estéreo. Cuenta además con un cable de 1.8 metros para poder alcanzar el equipo sin problemas.
Creative Sound Blaster Z
La Creative Sound Blaster Z es una tarjeta de sonido enfocada a jugadores, y muestra de ello es su diseño agresivo. Cuenta con un escudo frente a las interferencias electromagnéticas (EMI) en metal anodizado rojo que le aporta un aspecto sensacional y permite entrever el procesador Sound Core3D desde una zona transparente.
Bajo una interfaz PCI-Express x1, podremos contarla a prácticamente cualquier equipo, pues ya son muchos años integrando dicha conexión en las placas base y ya era hora de dejar de lado el PCI tradicional.
También podemos ver desde el lado interno el conector para el panel frontal de audio de nuestro equipo, el cual es recomendable insertar antes que la propia tarjeta, pues puede resultar algo complicado encontrarlo.
En el margen posterior encontramos las múltiples salidas y entradas que nos ofrece la Creative Sound Blaster Z. De izquierda a derecha disponemos de:
- Entrada de micrófono o línea
- Salida amplificada de auriculares hasta 600 ohmios
- 3 salidas de audio 5.1 para altavoces
- Salida óptica digital (Toslink)
- Entrada óptica digital (Toslink)
Un detalle muy importante es la inclusión de una salida independiente para auriculares, lo que permite tener conectados de forma simultánea estos y los altavoces e intercambiar la salida de audio activa desde el software incluido.
El lado posterior se muestra completamente libre de componentes, por lo que pasemos a retirar el escudo EMI para echar un vistazo más a fondo a estos.
El PCB de la Creative Sound Blaster Z no está muy poblado para tratarse de un modelo 5.1 con entrada y salida digital, pero los componentes integrados son de calidad.
En el centro de la tarjeta encontramos el procesador Sound Core3D, un modelo de 4 núcleos que ofrece aceleración por hardware solo en juegos que incluyan la tecnología ALchemy, aunque cualquier ordenador moderno no notará la diferencia de la ligera carga a la que sería sometida la CPU.
Para la conversión digital-analógica (DAC) disponemos del chip Cirrus Logic CSS4398 que ofrece 192 kHz a 24 bits para la salida estéreo y hasta 96 kHz para salida 5.1. Para la entrada de audio nos encontramos con el chip Cirrus Logic 8416CN a 96 kHz. De la amplificación para auriculares se encarga el amplificador operacional (OP-AMP) JRC 4556A, un buen modelo que ya se encontraba en modelos de anteriores generación de la marca.
Destacar por último la inclusión de una pareja de LEDs rojos que harán las delicias de los amantes de la iluminación interna del PC.
Pruebas
Hemos conectado la Creative Sound Blaster Z a nuestro habitual equipo de pruebas:
- Placa Base ASRock Fatal1ty Z87 Killer
- Procesador Intel Core i7-4770K (por cortesía de Mountain)
- AMD Radeon R9 290
- Memorias Corsair Vengeance Pro 2133 MHz
- Fuente de Alimentación Corsair GS800
- SSD Corsair Force LX 512 GB
- Sistema Operativo Windows 8.1 64 bits
- Altavoces Scythe KroCraft Speaker Rev.B
- Amplificador Scythe Kama Bay Amp Mini Pro
- Auriculares Astro A40 + MixAmp
Lo primero de todo ha sido descargar la última versión de los drivers desde la web de Creative. Me ha sorprendido gratamente que este aspecto ha mejorado enormemente, pues hace años cuando intentaba buscar algún driver de la marca era un quebradero de cabeza e instalarlos aún más. Ahora, tras descargar algo más de 150 MB, lo tenemos todo listo para disfrutar de la Creative Sound Blaster Z.
Echemos en primer lugar un vistazo al software SBX Pro Studio encargado del control del audio:
En la pestaña inicial, SBX Pro Studio, encontramos por defecto activos algunos de los efectos disponibles, algo que a nuestro parecer es un grave error debido a que modifica en gran medida el sonido, sobre todo con el efecto Surround que se hace incluso desagradable reproduciendo música. De cualquier forma, es un problema menor, pues no tenemos más que desactivarlo para empezar a disfrutar de un excepcional sonido, aunque dejemos esas valoraciones para más adelante. Eso sí, si te gustan los graves por encima de todas las cosas, el efecto Bass es tu gran amigo.
La pestaña CrystalVoice se centra en la captura de audio por parte del micrófono, con un juego de efectos del mismo nombre. La opción FX permite juguetear un poco con nuestra voz con efectos divertidos más que otra cosa. Es en las opciones Noise Reduction y Acoustic Echo Cancellation donde encontramos grandes bazas para ofrecer a nuestros amigos una voz clara y libre de ruidos externos en nuestras partidas online. Obviamente no son efectos muy adecuados para grabarnos cantando, pero tampoco es lo que pretende esta tarjeta más enfocada a gamers.
El Scout Mode promete “escuchar a sus enemigos desde más lejos”, algo que “consigue” realzando los medios con una “simple ecualización”, pues las diferencias no son muy grandes y seguramente consigamos lo mismo desde el ecualizador. Eso sí, cómodo es.
La cuarta pestaña, Altavoces/Auriculares, permite justamente alternar entre las dos salidas de audio cómodamente, pues podemos tener tanto unos como otros conectados de forma simultánea. Igualmente podemos elegir el tipo de salida para altavoces e incluso configurar de forma más exhaustiva la posición y frecuencias que queremos aportar a nuestros altavoces desde el siguiente software dedicado.
Volviendo al software principal, vemos como en la pestaña Cinemático podemos configurar las opciones de codificación Dolby Digital Live y DTS Connect.
Mezclador tiene poco que comentar más allá que la posibilidad de elegir que función cumple la entrada de audio, si capturar desde un micrófono o desde una entrada de línea.
El ecualizador ofrece 11 bandas con bastante afinación y perfiles pre-establecidos entre los que se incluye uno para juegos, aunque ya es algo al gusto y nunca recomendable para la reproducción musical en equipos de cierto nivel.
La última pestaña solo permite mandar el audio estero a la salida digital, algo que bien podían haber integrado en otra pestaña.
Podemos además crear perfiles que nos permiten cambiar rápidamente entre configuraciones que establezcamos previamente, muy útil si queremos un sonido drásticamente distinto para cine, música o juegos.
Centrándonos en lo más importante, el sonido, hemos de comenzar diciendo que la diferencia de calidad con respecto a la controladora de sonido integrada en la ASRock Fatal1ty Z87 Killer, un modelo de los que presumen de calidad sonora con funciones extras, es abismal, otro mundo.
Hemos escuchado música durante horas tanto en ficheros MP3 con alto bitrate como en ficheros FLAC sin pérdidas por compresión para adaptarnos a su sonido y poder apreciar mejor los matices que nos ofrece.
La Creative Sound Blaster Z genera un sonido vivo y potente de alta calidad. Hemos apreciado como los graves se hacen más limpios y comen menos terreno a otras bandas, mientras que agudos y medios se reproducen claros y con gran nitidez.
El amplificador de auriculares es un gran punto a favor de la Creative Sound Blaster Z, pues modelos con cierta impedancia se benefician en sobremanera. Los modelos convencionales con baja impedancia (32 ohmios) pueden sufrir con tanta amplificación y tendremos que controlar el volumen para no pasarnos, pues es realmente bestial lo que puede ofrecer esta tarjeta.
En películas, el sonido es tan bueno como en música, aunque podemos usar algunos efectos para darle mayor color al sonido si así nos gusta, pues opciones no nos faltan.
Donde más partido se le puede teóricamente sacar es en juegos, y digo teóricamente porque si bien el “Scout Mode” nos ofrece cierta ventaja al escuchar pasos, y otros sonidos en las bandas de frecuencias medias, no es algo que no podamos conseguir con cierta ecualización manual y tampoco nos va a hacer jugar mejor a los tiros.
El micrófono de haces incorporado resulta ser mucho más poderoso de lo que podíamos pensar, pues colocado a medio metro de nuestra boca, bajo la pantalla, captura el sonido de forma excepcional con las funciones Noise Reduction y Acoustic Echo Cancellation activas. Esto nos permite algo tan interesante como olvidarnos de adquirir unos auriculares “gaming” o con micrófono y optar por modelos Hi-Fi sin tener que pensar en “incómodos” micrófonos de pinza.
Conclusión
Si bien en la actualidad la nueva generación de placas base presumen de gran calidad en su sonido integrado, este no es siempre el caso y las diferencias se hacen patente cuando usamos una tarjeta dedicada como es la Creative Sound Blaster Z. Con ella obtenemos un gran salto adelante en lo que a calidad de sonido se refiere, además de funciones que benefician sobre todo a los jugadores en este modelo concretamente.
Podemos encontrar a la venta la tarjeta de sonido Creative Sound Blaster Z en la página oficial de Creative por 89.99 euros, aunque por 10 euros más podemos hacernos con el modelo ZX que incluye un módulo de control con las conexiones traseras duplicadas y control de volumen para mejor acceso. Debemos anotar que el modelo analizado se puede encontrar algo más económico en tiendas online, pero no así el ZX.
Hemos de hacer hincapié en que la adquisición de esta y otras tarjetas de sonido de gama media/alta tiene sentido siempre y cuando contemos con altavoces y/o auriculares a su altura, pues adquirirla para dar sonido a unos altavoces de incluso menor precio, por tener una guía, tiene poco sentido.
Desde del El Chapuzas Informático le otorgamos el Galardón de Oro a la tarjeta de sonido Creative Sound Blaster Z.